La declaración del gobernador Carlos Sadir en su reunión con el presidente Javier Milei, asegurando que su provincia acompañará "todo aquello que le sirva al país", suena a un compromiso cívico admirable, ¿verdad? Pero la verdad es que esa frase, ese guiño al pacto nacional, se desmorona estrepitosamente al confrontarla con lo que sucede en "su casa", en la provincia de Jujuy, lo que genera una profunda incoherencia política y una hipocresía institucional que no podemos ignorar.