La doctrina moralista les ha solicitado a las 31 autoridades ministeriales que han desfilado en más de siete años por las 15 carteras a sostener la visión maravillosa del patrón, aún a costa de su credibilidad. La prueba cabal se encuentra en el distanciamiento de Agustín Perassi (marzo 2022), quien recién empezó a sacar los trapitos al sol, cuando le pidieron su renuncia como titular de Gobierno y Justicia. Durante más de un periodo ofició como un subordinado del oficialismo, pero al primer cuestionamiento sobre los planes de Gerardo Morales para reformar la Constitución, literalmente lo removieron sin mayores atenuantes y no tuvo reparos en ventilar el entramado de falsedades que se articulaban desde Casa de Gobierno.
Encarnado en Luis Martin, encontramos reiterados y recientes ejemplos de un funcionario con jerarquía que debe evadir al periodismo crítico, con quienes tenía buena relación en su anterior rol como secretario de Seguridad Vial y titular de Delitos Complejos, al no encontrar recursos verbales para justificar el evidente aumento de la inseguridad y hechos de violencia en las calles. Tal es así que en su última aparición pública, prefirió concentrarse en los actos por el 213° de la Revolución de Mayo gambeteando una pregunta de la prensa inherente a su labor.
El ministro esquiva las preguntas sobre inseguridad en Jujuy
Pero no es el único ministro que debió sostener el relato aún cuando el archivo lo desarticulaba, en Infraestructura Carlos Stanic debió hacerse cargo de la herencia dejada por el actual diputado nacional Jorge Rizzotti por ejemplo sobre Ruta Provincial 56. Antes de irse al Congreso (2019), su antecesor auguraba un trabajo continuo y eficiente sobre la ruta que conecta Alto La Viña con San Pedro y exceptuando un tramo más bien céntrico, las áreas rurales que circula este camino están en deplorables condiciones.
Deplorable estado de la Ruta Provincial N°56
Cuando Stanic fue consultado en mayo de 2022 por el ritmo de obra, solo pudo atinar “Trabajamos sin prisa pero sin pausa, el objetivo es avanzar de a tramos. Luego de Carahunco con un bacheo y obras menores podemos hacerla totalmente transitable”, respuesta que no cayó bien entre los vecinos de la zona. Incluso en la última semana, el ministerio de Infraestructura subió un parte con verdades a medias sobre la finalización en trabajaos de pavimentación en las rutas provinciales 42 y 43 que conectan las localidades tabacaleras. Siendo que las imágenes irrefutables exhiben rutas en pésimo estado.
Imágenes de la Ruta 43 en deplorable estado
En cuanto a la acéfala cartera sanitaria, los tres doctores que la administraron durante los últimos siete años, se han empecinado en ratificar el éxito del Plan Estratégico de Salud y la descentralización. Siendo que los hospitales del interior se caen literalmente a pedazos, algunos desabastecidos de personal especializado e insumos básicos. Estos hechos han motivado manifestaciones continuas en toda la provincia, ruidazos, abrazos simbólicos, marcha de las velas y otros formatos de protesta con apoyo de la comunidad.
Juan Carlos Abud Robles en sus dos etapas como ministro de Desarrollo Produtivo ha sido un gran agente publicitario del cambio de matriz productiva. Siguiendo el libreto de Gerardo Morales a rajatabla, mandando a los productores de economías regionales a plantar cannabis y alcachofas, incluso migrar hacia la cría de porcinos. Pero el relato que más ha sostenido, siendo incluso actor protagónico, fue el montaje de fabricas de baterías de litio.
A pesar de los numerosos memorándums, viajes internacionales y obras en zona periqueña, la realidad demuestra que los capitales italianos ni multinacionales chinas han puesto todavía un solo dólar, mucho menos creado un puesto de trabajo genuino.
Hasta el gobernador electo Carlos Sadir, con gran incomodidad ante la prensa, se ha visto obligado a confirmar un superávit fiscal que el bien sabe como contador, no tiene asidero. Aún con recaudación de impuestos record, recibiendo cada vez más dinero en concepto de coparticipación federal y ajustando el salario de empleados estatales por debajo de la inflación, la deuda adquirida por la gestión Morales supera con creces los ingresos. Pero como llevarle la contra al jefe que se ufana en los medios nacionales de “tener plata de sobra”.
Gerardo Morales: "Tengo equilibrio fiscal, me sobra plata"