Tabaco: el fracaso de Abud Robles y Giacoppo en los tiempos de Morales
Desde hace ya mucho tiempo Radio 2 viene reflejando la abrupta caída que viene experimentando el sector tabacalero en la provincia. Hablar de Jujuy como la mayor productora de tabaco del país es algo que ya quedo en los anales de la historia.
Datos claves:
- Jujuy bajó la producción de tabaco de 44 a 32 millones de kilos.
- El ministro de producción Juan Carlos Abud Robles y la senadora Silvia Giacoppo son las caras visibles del gobierno con influencia en el sector.
- El Fondo Especial del Tabaco es un impuesto que pagan los fumadores y es parte del precio del tabaco: si hay menos producción se recibe menos dinero.
Durante la administración Fellner, la política tabacalera pasaba indefectiblemente por las manos de Guillermo Jenefes (ex vicegobernador), quien prolijamente se encargó de comenzar un lento pero seguro proceso de eliminar a los pequeños productores y concentrar la producción en la menor cantidad de manos posibles.
La pujanza de un sector fue lentamente devorada por mezquinos intereses urdidos por la voracidad de unos pocos, que desde los principales estamentos de poder fueron minando las posibilidades de los más vulnerables. Aún recordamos los constantes reclamos de los pequeños productores, que sistemáticamente eran subyugados desde las más altas estructuras del poder político y empresarial.
Contrariamente a los esperado, y a lo anunciado durante la campaña electoral, la administración Morales resolvió exacerbar la lógica Jenefes entregándole a Juan Carlos Abud Robles y Silvia Giacoppo toda la política referida a la producción más importante que tiene la provincia, no solo por el volumen de dinero que maneja, sino también por la cantidad de mano de obra que genera.
Desde hace cuatro años la debacle del sector es cada vez más elocuente, menos hectáreas, menos kilos, menos mano de obra, menos Fondo Especial del Tabaco (FET) y una drástica reducción del Producto Bruto Geográfico.
Este 2019 Jujuy cerrará con 2500 hectáreas menos de tabaco, y a menor cantidad de tierra plantada es mayor la cantidad de personas sin trabajo, la relación es directamente proporcional, y en este delicada cuestión ni Abud Robles ni Silvia Giacoppo emiten opinión alguna.
Para colmo de males, Gerardo Morales, a instancia de Silvia Giacoppo resolvieron elaborar un plan de salvataje a la cooperativa, la idea fue pedir prestamos afectando el FET y la provincia como garante, todo un verdadero dislate que termino en catástrofe.
Para tener en cuenta, la Coopertiva de Productores Tabacaleros de Jujuy, durante la gestión Morales – Abud Robles Giacoppo, pasó de comprar 21 millones de kilos a 11 millones de kilos, una reducción abrupta que deja al descubierto una mala praxis sin precedentes, aunque no son pocos los que sostienen que no se trata de impericia sino de un explosivo combo donde a este ingrediente se le agrega una alta dosis de perversidad.
El relato de culpar a elementos exógenos por esta crisis se cae cuando vemos los números de la Cooperativa de Productores Tabacaleros de Salta, que en igual período pasó de comprar 15 millones de kilos a 22 millones.
Jujuy llegó a producir 44 millones de kilos de tabaco y hoy está en 32 millones.
La producción tabacalera de la provincia se llevaba el 43% del total del Fondo Especial del Tabaco, dinero constante y sonante que llegaba regularmente a la provincia generando el derrame lógico de las producciones intensivas.
Hoy solamente el 32% del FET llega a Jujuy, dejando en el olvido el oropel que nos ubicaba como la mayor productora del país.
Mientras los productores salteños ya están hablando del tabaco Virginia del Norte Argentino, y de una Cámara salto jujeña, en Jujuy, el gobierno les acaba de dar un nuevo mazazo a los productores: violentando todas las leyes vigentes, puso los dineros del FET en el presupuesto, lo que esta taxativamente prohibido. Ahora de una manera absolutamente descarada el ejecutivo usará el dinero de los productores para destinos absolutamente distintos a los intereses de los productores.
Los salteños ya comenzaron a llamar a los productores jujeños para que se sumen a esta nueva Cámara que están estructurando, lo que hace presumir que para el 2020 las entidades de la provincia quedaran literalmente vacías.
El tabaco es un nuevo fracaso de la gestión Morales, que ya está pagando los costos políticos, pero el costo social indefectiblemente caerá sobre las cabezas de los más pobres.