- El intendente de La Quiaca volvió a reclamar por una Ley de coparticipación municipal.
- La lista de funcionarios que pidieron actualizar la norma se extiende por más de 4 años.
- Tanto en Casa de Gobierno como en la Legislatura se rehúsan a actualizar el actual mecanismo.
Coparticipación municipal deficitaria, el gobierno se resiste a soltar la soga
El intendente de La Quiaca volvió instalar el tema en la agenda mediática entendiendo que el actual esquema de reparto esta desactualizado. Un antiguo reclamo que atraviesa a muchos de los intendentes que no pertenecen al riñón oficialista y deben ingeniárselas, para cubrir el creciente gasto público.
Jefes comunales, intendentes o funcionarios públicos en general unidos a lo largo de los últimos cuatro años por un reclamo en común: cuentas claras reparto justo de los recursos coparticipables entre los 63 municipios.
Zeitune y Mendieta en 2019, Demarco Paniagua Tolaba Romero y varios más en 2020, Gallardo se sumó en 2021 y Soruco lo padece en 2022 por citar un puñado de apellidos que han tenido que realizar malabares para ordenar las arcas públicas. Incluso Raúl “Chuli” Jorge histórico aliado del gobernador, insiste en cada uno de sus discursos de apertura de sesiones (desde su primer mandato y hasta la actualidad) en la necesidad de sancionar una nueva Ley.
Necesitado de fondos el intendente quiaqueño, vuelve a instalarse en la agenda mediática, buscando cosechar voluntades políticas más allá de los representantes del Frente de Todos, que en absoluta minoría poco podrán hacer en una Legislatura dominada por el partido radical cuyo desinterés en redactar una nueva norma es evidente.
“El gobierno manifiesta que la Ley de coparticipación existe, en todo caso creemos que debe ser actualizada. Se basa en una determinada cantidad de empleados los cuales ha crecido la población y nos obliga a pelear una actualización…”, describió a Radio 2 Blas Gallardo.
El balance arroja números negativos para la localidad fronteriza, según explica el intendente existe un déficit que ronda los $2 millones “no incluye la actualización de empleados y la cantidad de funcionarios en el gabinete”, obligando a la administración municipal a costearlo con recursos propios. Por consiguiente se entiende que al aumentar la población y la planta de trabajadores del Estado, los recursos económicos deberían ser directamente proporcionales.
Según Gallardo el gobierno se excusó alegando, que incluso antes de su llegada a la intendencia, entre 2017 y 2018 se pactó un acuerdo todavía vigente para la repartición de la coparticipación “eso no se ajusta a nuevas realidades o inflación”.
La Ley solo requiere tratamiento y eventual aprobación, desde el bloque Juntos por Jujuy fue presentado para el corriente período un nuevo proyecto. Solo falta voluntad política.
MORALES ESCRIBIÓ LA LEY CON LA MANO Y AL ASUMIR LA BORRÓ CON EL CODO
Jujuy es la única provincia que no cuenta con una Ley de coparticipación a la altura de las circunstancias. Gerardo Morales lo sabe perfectamente bien, la gestión para sancionar Ley equitativa fue uno de sus proyectos de campaña allá por el lejano 2015. Un punto débil que su antecesor Eduardo Fellner debió reconocer antes de dejar el cargo “…No lo logramos. Los intereses en juego son muchos y el necesario acuerdo previo al tratamiento legislativo es muy difícil de lograr”.
Por citar un ejemplo mientras oficiaba como senador, Morales presentó durante un comité radical en 2012 su proyecto de Ley acompañado de figuras como Mario Fiad, Alberto Bernis o el propio intendente capitalino. “Equidad, certeza y previsibiidad”, fueron algunos de los términos empleados durante el incipiente debate; tras seis años de gestión ha quedado claro que el interés no era genuino.
Curiosamente la visita espontánea de Alberto Fernández y la repercusión generada en el seno de la Legislatura evidenció la doble vara del gobierno provincial cuando este asunto es tratado sobre el plano federal nacional.
El ex ministro de Producción y actual diputado oficialista Abud Robles defendió a capa y espada la carta de repudio contra el mandatario nacional. Pedro Belizán del PJ les había recriminado minutos antes, que los miembros del gabinete jujeño ignoran de la misma manera (que el presidente hizo con Morales) a los municipios justicialistas cuando de se aventuran al interior.
“Este es un tema institucional y compararlo con el tema de los municipios como se hizo acá, es minimizar el problema. Estamos hablando de algo muy caro para todos los jujeños, la paz que hemos conseguido durante todos estos años, la violencia que se terminó. No tienen que ofenderse…”.