Como no hay reacción desde la policía, hoy se defienden con lo que tienen, como pueden, de los delincuentes. Todo vale, incluso usar un palo como arma.
El centro de la delincuencia, dicen, es avenida Eva Perón, donde recientemente hubo varios robos. La falta de iluminación propicia los hechos y la zona es más peligrosa de noche, justamente por eso.
Electrodomésticos, bicicletas, mercadería, los ladrones no tienen preferencia y los vecinos saben que roban para comprar estupefacientes. Incluso saben dónde se reúnen, identificaron el lugar, pero aparte de algunos allanamientos, no hubo medidas de fondo de parte del Ministerio de Seguridad o la Policía.
Embed - Comerciantes preocupados por ola de robos en barrio San Pedrito
Tampoco hay respuestas desde la Municipalidad al pedido de iluminación de la avenida, entre calles Libertador y Zurita, donde las luminarias se fundieron durante la última tormenta de enero.
Los delincuentes también rondan los comercios, haciendo inteligencia, y esperando un descuido o el cierre de los locales. Los comerciantes tienen que vigilar las puertas, cuidarse las espaldas y esperar que nada les ocurra. Es común encontrar candados en las puertas tanto de comercios como de viviendas, a veces más de uno y hasta cuatro.
“Conozco a varios delincuentes y sé cuándo hacen vigilancia. Llamamos a la policía y no vienen. Solo acuden por algún chusmerío”, dicen en la zona.
Los ladrones no tienen miedo de meterse en las casas por la falta de iluminación policías, y hay robos frecuentes de teléfonos celulares en las paradas de colectivos.