Susana Ajalla, vecina del barrio, expresó su indignación y desesperación ante la situación: "Vivimos olvidados. Cada vez que llueve, el agua baja y lo destroza todo. Las calles quedan intransitables, no se puede pasar de un lado al otro. Los remiseros no quieren venir porque arriesgan el auto. Las ambulancias casi nunca entran porque está lleno de piedras grandes y no se puede caminar ni transitar. En caso de urgencia, no hay forma de salir ”, enumeró los problemas comunes antes seguir con la lista de reclamos desatendidos y peligros potenciales".
Vivimos rodeados de yuyos, animales como víboras, sapos, alacranes e incluso tarántulas que ya mataron algunos vecinos Vivimos rodeados de yuyos, animales como víboras, sapos, alacranes e incluso tarántulas que ya mataron algunos vecinos
Embed - Las calles de Loteo Nuevo Perico fueron tragadas por el agua
Ajalla también denunció la falta de iluminación y el incumplimiento de promesas por parte del gobierno municipal, recordando que durante 2024 se alcanzó un compromiso por escrito del intendente para extender la red de luminarias, obra que hasta el momento no se cumplido: “Por la noche, la oscuridad es total, y seguimos esperando respuestas”.
La situación afecta especialmente a los niños que deben asistir a las escuelas cercanas, como el colegio secundario Nº 7 y la escuela primaria Nº 460, afortunadamente aún sin clases por las vacaciones de verano, pero es habitual ver como en época estival llegan al aula con la ropa, zapatos y útiles mojados.
Los vecinos exigen que el municipio de Perico y el gobierno provincial asuman la responsabilidad que les corresponde con una restructuración pluvial, siendo que el agua viene bajando desde el lejano barrio Santo Domingo.
No es justo vivir así, pedimos soluciones inmediatas y que el intendente cumpla con lo pactado No es justo vivir así, pedimos soluciones inmediatas y que el intendente cumpla con lo pactado