- El presidente de SUSEPU, Carlos Oehler, desconoce cuanto recauda el ente por la Tasa de Fiscalización.
- Nunca ha sido transparentada la información, pero se presume una suma multimillonaria para el funcionamiento de una estructura con escaso personal.
El presidente de SUSEPU "olvidó" cuánto recauda mensualmente por la tasa de fiscalización
Los recursos económicos que percibe mensualmente la Superintendencia de Servicios Públicos continúan envueltos en un misterio. Carlos Oehler designado presidente a mediados de 2022 reconoció que “no tiene la cifra exacta”, alimentando suspicacias en torno al volumen de fondos que disponen para su funcionamiento.
Las facturas de luz/agua en Jujuy se han convertido en motivo de debate popular, ya sea por lo difícil que resulta costearlas luego de los tarifazos dispuestos tanto en provincia como en Nación o por el hecho que al menos un tercio de su composición corresponde a tasas e impuestos imposibles de eludir para los usuarios.
Al siempre cuestionable cargo FOPEJ se le suma la Tasa de Fiscalizacón y Control, este último incluido en 1996 junto con la Ley de Creación del ente contralor con el objetivo de sostener las gerencias que conforman su estructura: gravando con 1,5% sobre el consumo de energía eléctrica y 1% en el caso de Agua Potable en base a los m3.
Se estima que el volumen recaudado es multimillonario, aunque el presidente de SUSEPU se reconoció desconocedor de tal monto. De hecho ante los periodistas locales prefirió seguir su campaña de difusión antes de transparentar datos sensibles para el contribuyente.
Conforme se acerca un nuevo vencimiento para inscribirse en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) distintas organizaciones estatales y privadas aceleran las campañas informativas para que nadie quede afuera de la segmentación tarifaria. En ese contexto, el presidente de SUSEPU, Carlos Oehler, brindó una improvisada rueda de prensa donde ensayó respuestas protocolares y sostuvo la estrategia de responsabilizar al gobierno nacional por los aumentos tarifarios, aunque la quita de subsidios ordenada por el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, recién inició en junio para los dos segmentos que estaban exentos.
Estamos en plena campaña procurando que los usuarios de gas y energía eléctrica se inscriban en el RASE, porque la fecha límite es el 31/07 el impacto de no hacerlo es muy alto. Estamos intentando llegar al mayor público posible, especialmente quienes son beneficiarios de la tarifa social y cuyos datos son socioeconómicos no están cargados aún.
Nos están ayudando instituciones como la Defensoría del Pueblo, la propia distribuidora, el Populorum Progressio. Capacitamos gente para que pueda asistir para la carga de los formularios. El trámite es exclusivamente online, documento disponible en distintas aplicaciones entre ellas Mi Argentina o Tujujuy también a través de Anses y argentina.gob.ar.
Cuando finalmente una periodista preguntó por los aumentos desproporcionados, Oehler primero optó por minimizar “¿Qué tarifazos”, para luego de una interpelación, cargar todas las responsabilidades sobre el gobierno libertario que eligió cambiar el sistema de subsidios al volcarlo sobre la demanda focalizada.
Si bien es cierto que los usuarios residenciales de altos ingresos, comerciales y grandes consumidores de energía eléctrica pagan la tarifa plena desde principios del período, la decisión de retirar paulatinamente los subsidios para los hogares de bajos y medios ingresos recién impactó con las boletas del 4to período (recordar que en Jujuy se paga a bimestre vencido).
“Hay una decisión política del gobierno nacional, el impacto que tiene la salida del sistema de subsidios a la oferta para ir a la demanda focalizada ha significado que la tarifa en los N2 a pase de un kilovatio a $4000 en febrero a $16000. Para el N3 saltó a $29.000, el costo general para el resto de los usuarios ha pasado de $44.000 a $59.000 más allá de lo que las provincias podamos hacer, los impactos de esta decisión es muy fuerte”, con estos ejemplos parcialmente verosímiles Oehler se deshizo de los cuestionamientos, sin reconocer que durante un bimestre el salto tarifario que superó el 70% promedio para usuarios de bajos (N2) y medios ingresos (N3) dependió exclusivamente de EJESA y SUSEPU, quienes aprobaron un cuadro tarifario donde el cargo fijo y el uso de red se encarecieron exponencialmente.
Durante ese lapso, febrero-junio, no hubo injerencia de las medidas nacionales sobre ambos segmentos usuarios, que de hecho representan la gran mayoría del universo de clientes de EJESA. Nuevamente con el tema original, la falta de rendición de cuentas de SUSEPU, no es una sorpresa, pero resulta poco creíble que su titular desconozca siquiera la cifra aproximada de recaudación.
La oficina de Gestión Comercial de la distribuidora EJESA reconoció al cierre del ejercicio 2023 un total de 240.810 usuarios, mientras que DIPEC informó también en 2023 que la empresa estatal Agua Potable cuenta con 257.649 usuarios activos. No hace falta mucha imaginación para calcular la cantidad de 0´s que tendrá la transferencia mensual de pesos recibida en las cuentas de SUSEPU sabiendo del cobro del 1,5% y 1% respectivamente por servicio básico con una masa de usuarios que ronda entre ambos los 500.000.