Jujuy | Insólito |

La ausencia del director de Transporte en la peor crisis

El conflicto en el transporte implicó una paralización del servicio por un total de 6 días afectando a la mayor parte de la ciudadanía. Hablaron los empresarios, los choferes, concejales, diputados y hasta los propios ministros, aunque llamó la atención la discreta intervención del funcionario que tenía un rol central en el tema, Jorge Skinner.

Con un problema que comenzó a tomar forma a finales de 2018, a partir de la quita de subsidios por parte de Nación, el 2019 viene siendo un año marcado por reclamos en el transporte jujeño.

Un conflicto que implicó una paralización total del servicio público de pasajeros por un periodo de 6 días afectando a miles de jujeños que dependen del mismo para poder trasladarse a sus respectivos trabajos.

El problema tuvo tal magnitud que llevó a que el gobierno se pronunciara y acusara a empresarios y sindicalistas de tomar de rehenes a los usuarios. Paralelamente, hubo concejales que salieron a exigir que las empresas “muestren los papeles” y ministros que instaron a que se dé un cierre definitivo al conflicto.

El gran ausente en todo este complejo escenario fue el director de Transporte, Jorge Skinner, quien prácticamente no apareció en público y al que no se hizo mención pese las incumbencias propias del rol que desempeña.

La Dirección de Transporte depende del Ministerio de Infraestructura y es una de las oficinas que más injerencia debió haber tenido en la búsqueda de una solución al conflicto.

Pese a ello, volvió a ponerse en evidencia, la falta de previsibilidad por parte del gobierno local ante un problema reiterado que se gestó durante 9 meses y finalmente terminó poniendo en jaque a una ciudad.

En los últimos meses, en un contexto netamente electoral, es notorio que los funcionarios administran sus apariciones con un criterio "estratégico": aparecen en actividades positivas pero evitan responder frente a las situaciones problemáticas. 

Las figuras de los ministros de trabajo, Jorge Cabana Fusz, y el de hacienda, Carlos Sadir, aparecieron en soledad y dispersas en medio de una crisis sin precedente. 

El gobierno no mostró equipo, y no se conocieron expresiones públicas de Skinner en medio de las negociaciones ni del conflicto. 

Los encuentros en el ministerio de trabajo lograron destrabar la situación, sin la intervención del funcionario. 

Temas

Dejá tu comentario