Un Consenso Fiscal es un acuerdo entre la Nación y las provincias, que contempla aspectos relacionados con la coparticipación y el esquema tributario de las distintas jurisdicciones. En el que se firmó entre la Nación y los gobernadores, el foco estaba en Ingresos Brutos (II.BB.) y el impuesto a los sellos. Entre los dos representan el 84% promedio de los recursos propios de las provincias.
Más presión tributaria para financiar la política
A cuatro años de que se aprobara una reforma tributaria y pacto fiscal que acordó bajar impuestos, Alberto Fernández firmó un nuevo pacto fiscal para subir impuestos y flexibilizar los topes de gasto de las provincias, con la adhesión de 23 de 24 de ellas.
En 2022 si se continuaba con el pacto fiscal que firmó Mauricio Macri de diciembre de 2017, algunas actividades, como las industrias manufactureras y actividades primarias, iban a pasar a estar exentas de Ingresos Brutos. Sin embargo, hoy en día rigen las alícuotas de 2019 porque cuando asumió Alberto Fernández se actualizó el pacto fiscal y se dejó de lado la reducción de la presión tributaria.
El Consenso Fiscal firmado entre 23 mandatarios provinciales y el Presidente Alberto Fernández se trata del pacto que, entre otros ítems, habilita a las provincias a subir impuestos. Los gobernadores apuraron su debate tras el desembarco de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía.
¿En qué consiste? Contempla aspectos relacionados con la coparticipación y el esquema tributario de las distintas jurisdicciones con el foco puesto en Ingresos Brutos y el impuesto a los sellos. Ambos representan el 84% promedio de los recursos propios de las provincias.
El pacto fiscal al que adhirieron las provincias da marcha atrás con el aprobado en 2017, durante el gobierno de Cambiemos, que iba en el sentido opuesto al actual. Apuntaba a la reducción progresiva de las alícuotas de Ingresos Brutos y el impuesto Inmobiliario, Automotor y Sellos, claves para el financiamiento de una provincia como Jujuy que por estos tiempos se encuentra embarcada en una delirante carrera presidencial.
En el 2017 se firmó un Pacto Fiscal, pero con un objetivo de baja de impuestos. Fue una idea con picardía política porque no establecía sanciones por incumplimiento. Entonces, no hubo cumplimientos.
En el 2020 y 2021 quedó suspendido por la pandemia y ahora está en el Congreso que está tratando la ley del Pacto Fiscal para el 2022 que va a ser aprobado porque las provincias quieren más dinero. Se les va a recortar de parte de la Nación las transferencias y se les da un cheque en blanco a las provincias para aumentar Ingresos Brutos, para seguir con Sellos, que es un impuesto medieval, y también le sugieren a las provincias que creen el impuesto a la transmisión gratuita de bienes, que es el impuesto a la herencia, se lo conoce con ese nombre, pero en realidad es donaciones, legados y herencias. La realidad es que sale perdiendo el contribuyente y el consumidor con esto porque IIBB se traslada a precios y el contribuyente va a tener que pagar más.
Es una pésima idea este Consenso Fiscal 2022 que en lugar de bajar los impuestos le da autorización a subirlos.
El pacto le pone topes al cobro de Ingreso Brutos que para muchas jurisdicciones se encuentran por encima de lo que rige en la actualidad. En concreto, algunas provincias quedarán habilitadas a aumentar la carga fiscal, como es el caso de Jujuy.
Si bien el pacto firmado en diciembre del año pasado no establece un tope unificado en Ingresos Brutos para todas las actividades, fija alícuotas máximas por rubro y cada provincia podrá elegir si utiliza esta posibilidad para subir los impuestos o no.
Durante el gobierno de Cambiemos se había acordado un esquema de reducción gradual del impuesto a los Sellos al 0,75% a partir de 2019, 0,5% a partir de 2020, 0,25% a partir de 2021 y eliminarlo a partir de 2022.
Nada de esto pasó, toda la ahora denominada “casta” política están en todo de acuerdo para aumentar los impuestos.
Hablan de solidaridad y del Estado presente, pero la pregunta que cabe es ¿solidaridad con quién?, ya que a mayor cantidad de planes es mayor la pobreza en La Argentina.
Cuando los políticos hablan de solidaridad, en realidad lo que intentan esconder es que la solidaridad es con ellos, ya que de los impuestos es del lugar donde se financian las campañas, y estamos en tiempo de campaña.