El grupo terrorista libanés estará fuera de combate al menos por los próximos 60 días tras más de un año de hostilidades, si se cumplen los términos del pacto. Ahora, Netanyahu podrá concentrarse en la guerra en Gaza, bastión del disminuido Hamas, y en su enemigo principal, Teherán.
Pero la pacificación de la frontera norte, trajo aparejada un efecto colateral: el fuerte aumento de la presión de los familiares del centenar de secuestrados que permanecen aún en Gaza, entre ellos ocho argentinos. El reclamo es unánime: exigen un pacto similar que permita la liberación de todos sus seres queridos.
“Muchos dicen que este acuerdo (de cese el fuego) puede ayudar a la liberación (de las personas que siguen cautivas en el enclave palestino desde el 7 de octubre de 2023). Yo hubiese preferido, por mis hijos Iair y Eitan y todos los rehenes, que primero se llegue a un acuerdo en Gaza”, resumió a TN Ruth Chmiel, madre de los rehenes argentinos Iair y Eitan Horn.
El martes por la noche, decenas de familiares se manifestaron en Tel Aviv para presionar al gobierno.
¿Es posible un acuerdo de cese el fuego en Gaza?
A fines de noviembre de 2023, Israel y Hamas lograron un breve acuerdo de alto el fuego que permitió la liberación de decenas de rehenes a cambio de cientos de detenidos palestinos. Pero desde entonces el pacto no pudo repetirse.
Hoy Gaza está devastada tras 13 meses de guerra. Hamas, fuertemente disminuido, tiene aún en su poder a un centenar de cautivos. Se trata de la única carta que le queda para presionar a Netanyahu.
Desde Washington, el presidente saliente, Joe Biden, quiere alcanzar ese acuerdo antes de que Donald Trump asuma el poder, el 20 de enero. Desconfía de su juicio para llevar adelante una pacificación de Medio Oriente. Por ello, le pidió ayuda a Qatar y Egipto, los dos mediadores tradicionales del conflicto. Hoy, una delegación negociadora egipcia viajó a Tel Aviv para intentar negociar una tregua y la liberación de rehenes.
Sin embargo, la desconfianza entre las partes es grande. “Estados Unidos y Egipto harán más esfuerzos para lograr un alto el fuego entre Israel y Hamas, pero me parece que aún no hemos llegado a ese punto”, dijo a TN el analista palestino Mkhaimar Abusada, jefe del departamento de ciencias políticas de la Universidad Al-Azhar en Gaza hasta antes de la guerra.
Según el analista, “Biden básicamente declaró que Hamas debe liberar a los rehenes israelíes para poner fin a la guerra en Gaza, lo que significa que Hamas no los liberará sin un acuerdo”.
“Esta es la única carta que tiene Hamas en sus manos, y sin que Israel acepte poner fin a la guerra y retirarse de Gaza, Hamas no va a liberar a los rehenes israelíes”, señaló.
Además, Abusada agregó: “Netanyahu declaró que una de las razones para aceptar un mal acuerdo con el Líbano es que quería separar a Gaza y el Líbano, la llamada unidad de frentes de resistencia, y también indicó que quería aislar a Hamas. Netanyahu y su coalición de derecha siguen repitiendo la victoria total contra Hamas, y cualquier acuerdo sin eso probablemente derrocará a la actual coalición en Israel”.
En ese complejo escenario, este miércoles Hamas reiteró su compromiso de lograr un acuerdo que detenga la guerra en la Franja de Gaza, pero siempre que implique “un cese total de las hostilidades, la retirada de las fuerzas de ocupación, el regreso de los desplazados y la conclusión de un acuerdo real y completo sobre el intercambio de prisioneros”.
Las exigencias del grupo palestino parecen lejos de las ambiciones israelíes. De hecho, Netanyahu viene insistiendo en que Hamas debe ser completamente destruido y que Israel debe tener el control permanente sobre varias partes de la Franja de Gaza. De hecho, una fuerte ofensiva se mantiene activa en el norte del enclave desde hace dos meses.
El temor ahora se apoderó de los gazatíes. Creen que el ejército israelí volverá a concentrar todos sus esfuerzos bélicos en su territorio. En tanto, Hamas seguirá atrincherado y seguirá con su táctica de guerrillas. Para la población civil, Gaza se ha quedado sola.