Nadie puede negar que Gerardo Morales es un adelantado, pero no necesariamente por su plan maestro para cambiar la matriz productiva. El mandatario está proyectando su candidatura presidencial con dos años de anticipación, adelantándose a la mayoría de los competidores políticos lógicamente más preocupados por la coyuntura 2021. Como ocurrió con las elecciones provinciales del 27/06 el gobernador personifica la campaña, sondea la opinión pública, hasta opaca sus propios candidatos y como daño colateral desatiende las urgencias que entre bombo, pasacalle y cánticos hacen vibrar su oficina.
De allí que el hartazgo generalizado sacuda las calles diariamente. Desde la cabeza de gobierno hacia abajo no hay un reconocimiento y consiguiente toma de decisión para curar los males del desempleo, la pobreza, el hambre. Jujuy no es una provincia utópica como la pintan Bouhid y Sarapura en sus discursos proselitistas.
Campaña VS necesidad: Jujuy al borde de un paro general por la negligencia estatal
“Varias jornadas de lucha tratando de generar dialogo con este gobierno que habla de paz, justicia y unión pero es todo mentira. No se puede ocultar la realidad de la provincia, la gente está cada vez peor, estamos decididos a que este gobierno nos reciba y de respuesta a los trabajadores de la economía popular”, declaró Walter Méndez de Somos Barrios de Pie.
Natalia Sarapura está de campaña gastando los recursos de los comedores y merenderos. Lo mismo que hicieron en las elecciones provinciales Natalia Sarapura está de campaña gastando los recursos de los comedores y merenderos. Lo mismo que hicieron en las elecciones provinciales
Justamente la ministra que ingresó a principios de 2019 para acercar posiciones con los sectores vulnerables, ha optado por priorizar su carrera política blindando la sede ministerial de Los Huaicos; una suerte de rockstar demasiado ocupada para firmar autógrafos, o en este caso aceptar peticiones de mercadería.
“Asistimos a 5.000 chicos en la provincia, estamos a punto de cerrar los comedores y merenderos porque es cada vez más difícil”, es la triste conclusión de Méndez.
La situación se ha vuelto tan crítica que las organizaciones sociales, otrora recelosas e independientes, llegaron a unificar los pedidos al darse cuenta que el trato del gobierno jujeño es negativamente imparcial: todos los reclamos son ignorados por igual, en el peor de los casos se llevan una contravención como respuesta.
“En este espacio coincidimos muchas organizaciones, repudiamos la política de este gobierno no solo ante la falta de respuesta a las organizaciones sociales, si no a todo los sectores con reclamos. Vamos a seguir jornada de lucha la próxima semana, a la misma vez profundizando las medidas, no se descarta corte de ruta”, aporta el referente de la CCC Gabriel Taboada.
Más de 95 mil familias no tienen donde vivir. Los campesinos no tienen donde producir. Hay problemas de violencia de género y femicidio irresuelto. Falta de trabajo, pobreza e indigencia Más de 95 mil familias no tienen donde vivir. Los campesinos no tienen donde producir. Hay problemas de violencia de género y femicidio irresuelto. Falta de trabajo, pobreza e indigencia