Luego de la aparición pública del propio presidente, del ministro de economía Martín Guzmán, en las que confirmaron ayudas extraordinarias a jubilados y a beneficiarios de planes sociales, se produjo una reunión en la Casa Rosada, de la que participaron 22 gobernadores y el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, por un lado, y el presidente de la Nación, Alberto Fernández, el jefe de gabinete Santiago Cafieron, el ministro del interior Wado De Pedro y el presidente de la cámara de diputados, Sergio Massa.
Allí se decidió la suspensión por un año del consenso fiscal que promovió la gestión del ex presidente Mauricio Macri en el año 2017, con el objetivo de sacarle presión tributaria al sector privado. Uno de los principales elementos de aquel consenso era la reducción paulatina hasta su eliminación del impuesto a los ingresos brutos.
Este es un tributo que le cobra el estado a quienes producen. La gestión Macri entendió que para el desarrollo del país había que incentivar a los que producen en lugar de cobrarles impuestos.
Según informaron los gobernadores Gerardo Morales, de Jujuy, y Sergio Uñac, de San Juan, en conferencia de prensa posterior a la reunión, la nueva gestión entiende que en el contexto actual de crisis los estados deben poder recaudar.
En consecuencia, aquel impuesto que tenían previsto no cobrar en 2020, finalmente será recaudado.
No se dijo con claridad qué destino le otorgarán los gobiernos a esa recaudación que se repone.
El criterio es redistribuir, esto es, entregar beneficios extraordinarios a sectores en situación de vulnerabilidad.
El gobernador Morales aseguró ante los periodistas acreditados en la Casa Rosada que para Jujuy la recaudación repuesta representa 1000 millones de pesos que no estaban previstos y con los que ahora se contará.
No aclaró el mandatario qué destino tendrá ese nuevo flujo de fondos, aunque es lógico suponer que ayudará a paliar el déficit operativo que tiene Jujuy para el próximo año, superior a los 5 mil millones de pesos.
La suspensión transitoria del Acuerdo Fiscal, generado en 2017, permitirá flexibilizar la política tributaria en las provincias. Es un alivio que tendremos durante un año para sostener un proceso de recuperación económica. Impactará en Jujuy con una recaudación de 1000 millones, dijo Morales en la sala de conferencias de la Rosada. La suspensión transitoria del Acuerdo Fiscal, generado en 2017, permitirá flexibilizar la política tributaria en las provincias. Es un alivio que tendremos durante un año para sostener un proceso de recuperación económica. Impactará en Jujuy con una recaudación de 1000 millones, dijo Morales en la sala de conferencias de la Rosada.
El impuesto a los ingresos brutos en Jujuy asciende, en promedio, a 1,5 del valor de la producción, aunque varía según la actividad.
De la audiencia, que se realizó en el Salón Eva Perón, participaron los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; Catamarca, Raúl Jalil; Chaco, Jorge Capitanich; Chubut, Mariano Arcioni; Córdoba, Juan Schiaretti; Corrientes, Gustavo Valdés; Entre Ríos, Gustavo Bordet; y Formosa, Gildo Insfrán.
También estuvieron los mandatarios provinciales de Jujuy, Gerardo Morales; La Pampa, Sergio Ziliotto; La Rioja, Ricardo Quintela; Mendoza, Rodolfo Suárez; Misiones, Oscar Herrera Ahuad; Neuquén, Omar Gutiérrez; y Río Negro, Arabela Carreras.
Concurrieron además los gobernadores de Salta, Gustavo Sáenz; San Juan, Sergio Uñac; San Luis, Alberto Rodríguez Saá; Santa Cruz, Alicia Kirchner; Santa Fe, Omar Perotti; Santiago del Estero, Gerardo Zamora; Tucumán, Juan Manzur; y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.