En una resolución que apunta a simplificar el acceso a productos médicos por parte de los ciudadanos, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) anunciará la eliminación de trámites y autorizaciones previas para la importación de determinados insumos médicos de uso exclusivo y particular. La semana pasada, el organismo
ANMAT autorizó la importación de sillas de ruedas, tensiómetros y otros insumos
La medida buscará agilizar los trámites para personas que importen productos médicos de uso particular. La autorización previa de ANMAT ya no será necesaria para una serie de insumos como bastones, muletas o nebulizadores.
La decisión alcanzará a productos como sillas de ruedas manuales, bastones, muletas, andadores, tensiómetros, nebulizadores y cintas kinesiológicas, entre otros, que ahora podrán ser comprados en el exterior sin intervención del organismo regulador, siempre que su destino sea el uso personal y no la comercialización.
“La medida forma parte de las directivas impartidas por el Ministerio de Salud para brindar mayor celeridad a los ciudadanos y concentrar los recursos del Estado en el control de nuevos desarrollos tecnológicos para la salud”, indicaron desde el organismo.
Qué productos se podrán importar sin intervención de ANMAT
La resolución incluirá una lista de insumos médicos de baja complejidad que ya no requerirán autorización sanitaria previa para ingresar al país, algo que hasta ahora implicaba la realización de hasta dos trámites formales ante ANMAT, además de la presentación de documentación detallada como la marca, el modelo y el país de origen del producto.
Entre los productos alcanzados por la medida se destacan:
- Sillas de ruedas manuales
- Bastones y muletas
- Andadores
- Estetoscopios
- Tensiómetros
- Nebulizadores
- Almohadillas eléctricas
- Coderas, rodilleras y muñequeras
- Bandas elásticas y cintas kinesiológicas
Cuáles son las condiciones para la importación
Según se aclaró oficialmente, los insumos adquiridos bajo esta modalidad deberán destinarse exclusivamente a uso personal, no podrán ser vendidos ni comercializados, y la responsabilidad sobre su uso y los posibles riesgos quedará a cargo del comprador.
Además, quienes deseen comprar estos productos en el exterior solo deberán cumplir con los procedimientos habituales establecidos por la Dirección General de Aduanas, como cualquier otro producto de consumo personal.