Alejandra Cejas demandó al diputado Rivarola por violencia de género, entendiendo que los ataques sufridos durante las sesiones del parlamento y seguidas en otros medios ameritaban que la Justicia se haga cargo, radicando la pertinente denuncia ante el Juzgado Especializado en Violencia de Genero Nº 1.
La Justicia manda al psicólogo al diputado Rivarola por la denuncia de Alejandra Cejas
Luego de la desmesurada demostración de poder y prepotencia ejercida por el diputado Rivarola en contra de la legisladora Alejandra Cejas, el Juzgado Especializado en Violencia de Género Nº1 impuso medidas restrictivas y mandó al diputado a que sea analizado por un psicólogo de la justicia.
Esta demanda de Cejas no solo se sostenía por los dichos del diputado Rivarola en el recinto, sino también por aquella mentada frase expresada por el legislador “…si Cejas fuera hombre al problema lo solucionamos de otra manera…”
Para Cejas y para personas expertas en temas de violencia de género, esta expresión escondía una amanezca velada, y que a partir de ese momento su integridad física estaba en riesgo.
El legislador coronó su derrotero de improperios cuando declaró que la legisladora debía ser asistida por un psicólogo.
Distintas agrupaciones de mujeres políticas se manifestaron a favor de Cejas, inclusive la Mesa de Mujeres Peronistas también emitió un duro comunicando repudiando la actitud del diputado Rivarola.
También, Marcela Durrieu, lidera una nómina de más de tres mil firmas de mujeres peronistas que le exigen por estas horas al Consejo Nacional del PJ, que imponga severas sanciones al diputado Rivarola, incluso que le exijan el cese inmediato en sus funciones del presidente del PJ local.
Con estos antecedentes en la mano, el Juzgado Especializado en Violencia de Genero Nº 1 resolvió dar curso a la denuncia de Cejas, imponiendo algunas medidas preventivas para salvaguardar la integridad de la diputada.
En su resolución, Mónica Cruz Martínez, titular del Juzgado Especializado en Violencia de Género Nº1, establece en el apartado VII inciso A) que “…Hágasele saber al accionado, Sr. RUBEN ARMANDO RIVAROLA que deberá ABSTENERSE de ejercer actos de violencia, como así también menoscabar, anular, impedir, obstaculizar o restringir la participación política, en contra de la Sra. ALEJANDRA NOEMI CEJAS…”
Esta medida se establece por un plazo de 180 días.
En cumplimiento de los protocolos establecidos por la pandemia, la denunciante y el denunciado Rivarola deberán comparecer por escrito.
Cruz Martínez también ordenó que el demandado diputado Rivarola se presente el próximo 18 de agosto a las 11,30 para ser evaluado por Diego Ficoseco, psicólogo judicial.
Mientras esto ocurre en el ámbito judicial de la provincia, las mujeres peronistas siguen exigiendo al Concejo Nacional del PJ una reunión urgente para que aplique las sanciones pertinentes al diputado Rivarola.
Este hecho que se dirime ahora en los juzgados de violencia de género, no es más que otro síntoma de la pobreza estructural de la política jujeña, donde un individuo del talante del diputado Rivarola llegó a ser presidente del PJ.
Como es más que elocuente, estos desvaríos crónicos quedaron evidenciados con los catastróficos guarismo obtenidos por el justicialismo local.