Sin soluciones ni control del gobierno, recrudece la violencia escolar en Jujuy

La madre de una alumna del Bachillerato N°16 denunció que su hija fue agredida.
Expuso que la estudiante que la atacó podría haber estado bajo los efectos de sustancias.
No parece haber control ni reacción del gobierno ante este tipo de hechos que continúan ocurriendo en establecimientos educativos de toda la provincia.

Internaciones. Temor. Son dos palabras que contienen todos los hechos de violencia escolar registrados en cualquier localidad de nuestra provincia. Que los directivos de distintos establecimientos educativos se quiten responsabilidades indicando que “los hechos ocurrieron fuera del establecimiento” es tan común como que el gobierno no actué en profundidad contra la problemática que no por ser usual deja de ser preocupante, sobre todo para las víctimas y sus familias.

Vilma es la madre de un alumna de Bachillerato N° 16 que fue agredida recientemente por otra alumna de ese establecimiento. Sin razón, la agresora la increpó acusándola de acciones que no había cometido. En la plaza cercana al colegio, la tomó del pelo y la tiró al suelo. Amigas de la atacante miraban y filmaban el video donde la víctima solo atinó a defenderse.

Para la madre de esta última el hecho fue premeditado, pero sin fundamento, ya que su hija, al igual que ella, se crio en una localidad del norte de la provincia, donde los estudiantes no acostumbran a pelear. Dolida por lo ocurrido, dijo que habló con la vicedirectora del establecimiento, quien los próximos días “hará lo que corresponde en estos casos, como citar a los padres de la agresora”.

Sin soluciones ni control del gobierno, recrudece la violencia escolar

También realizó la denuncia por el hecho en la seccional correspondiente.

Irá hasta las últimas consecuencias porque su hija tuvo que ser atendida por un fisioterapeuta por sus lesiones, continúa dolorida y medicada, y tiene miedo de salir de su casa. Como todas las víctimas de agresiones escolares que el gobierno no protege ni contiene, antes y después de que ocurren hechos como el mencionado.

Hay dos datos importantes mencionados por la madre de esta víctima: la agresora es mayor de edad, y mientras atacaba a su hija, habría dicho “no sé qué me fume antes de entrar a la escuela”, aunque no puede asegurar estas palabras.

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