Pero entonces ¿Qué sabemos hasta ahora? Las facturas de electricidad efectivamente vienen con aumentos, aún cuando muchos usuarios se encuentran en medio de un proceso de refacturación por los inexplicables montos recibidos durante el invierno. A no confundirse, tomando como ejemplo al usuario R1T1 el apartado cargo fijo pasará de $286,00 a $337,20 el consumo de energía ($/kWh) $3,4616 ascenderá a $4,6253 y en cuanto al ítem más costoso uso de red ($/kWh) 5,3246 a 6,2777.
“Para el que menos consume, es decir hasta 150 kWh mensuales el aumento rondará 18% para el cargo fijo y 34% el consumo. Hay autorizaciones de aumentos a nivel provincia, también en la energía mayorista, es decir aumentos nacionales que EJESA trasladará al usuario, un ajuste permanente de la energía”, amplió el economista Gastón Remy.
A continuación un gráfico ilustra los aumentos bianuales: solo observando la evolución del cargo fijo para el 2022 se deduce un aumento superior al 66%, más de 20 puntos por encima del acuerdo paritario estatal logrado hasta la fecha. En cuanto al valor del kilovatio, debe hacerse una salvedad, hasta hace dos resoluciones atrás no se había desprendido el uso de red.
“El gobierno parece empecinado, no respeta el rechazo a nivel popular. Los sueldos no se equiparan. Para el sector que menos consume desde diciembre hasta septiembre aumentó un 82% a nadie en el sector público aumentó, más que la inflación”, sintetizó Remy recordando que Cauchari no produjo un cambio sustancial en la economía del consumo doméstico, puesto que aún produciendo el 80% de la energía utilizada en Jujuy, los tarifazos no cesan.