Así como la boleta unificada de luz/agua (eventualmente GIRSU) está llegando con exorbitantes sumas de seis cifras a los hogares jujeños, el sector productivo no la pasa mucho mejor, aún cuando se encuentran fuera de la temporada de mayor consumo energético.
Productores jujeños son sometidos por la asfixia impositiva
El productor tabacalero Guillermo Berardi enumeró los grandes problemas que atraviesa el sector cuando se trata de obtener rentabilidad frente a los tarifazos permanentes.
Una finca tabacalera de 35 hectáreas, ubicada en Pampa Blanca, aún con las estufas de secado apagadas y un consumo eléctrico mínimo puede recibir cuantiosas facturas. Esta situación tiene a maltraer al productor Guillermo Martín Berardi y muchos otros colegas que desarrollan las industrias regionales.
“Me llego una factura de $630.000 sin usar la luz, porque en esta época no usamos energía eléctrica. Si fuera únicamente por el consumo, entre luz y agua no llegamos a $130.000 el resto se compone de tasas, impuestos y contribuciones, incluso alumbrado, barrido y limpieza que no tenemos por estar junto a un camino rural”, explicó con indignación en Sobremesa (Canal 2) sin dejar de mencionar la presión que ejercen otros tributos de tipo nacional como el IVA.
Además de la habitual presión impositiva que deben soportar los usuarios de cualquier categoría, en el caso de los productores se suma el Derecho a Uso de Red, cobrado por la distribuidora EJESA en carácter de potencia contratada, una suerte de canon anticipado para que la empresa les garantice la provisión necesaria de kilovatios durante la época de cosecha, cobrado incluso si por cuestiones técnicas o meteorológicas el servicio no siempre es prestado.
"Cada vez que hay un trueno se nos corta la luz. Estoy pagando a ellos, un canon para garantizarme esa energía. No me la dan, se cae un poste, se corta un cable, los transformadores son viejos. No aparecen ni la SUSEPU, las entidades productivas nos defendemos como deberíamos".
Respecto del Agua Potable, las tarifas proporcionalmente aumentaron todavía más como ya ha quedado demostrado en distintas notas de JujuyalMomento, casi a la par del gas natural, otro servicio que excedió el 300% en lo que va del año.
Molesto por las declaraciones recientes del director provincial de Recursos Hídricos, Guillermo Sadir, sobre supuestos niveles bajos de eficiencia en los sistemas de riego implementados por los productores, Berardi quien es ingeniero agrónomo, confirmó que “el actual riego por surco alcanza una eficiencia máxima del 52%”, muy por encima de los dichos del funcionario público y dentro de los márgenes aceptables de rendimiento.
Siendo que deben pagar el canon de riego ante la entidad estatal, no se guardó el reclamo, tildando de “la peor gestión de Recursos Hídricos que hemos tenido en los últimos años” y pidiendo que se revisen los métodos de transporte del líquido a sabiendas que existe un desperdicio aún mayor durante el trayecto diques – fincas comparado con lo que ocurre tranqueras adentro.
"Si es de aspersión la eficiencia es del 70% o por goteo llega al 90%, eso lo debatiremos dentro de la finca, pero no lo escucho hablar desde la eficiencia en el transporte de agua, desde que salió de los diques hasta llegar a los campos hay una pérdida tremenda, en vez de ponernos el caballo encima, porque no nos sentamos a pensar en el transporte".
"El agua del dique Los Molinos, por el río grande de Jujuy hasta San Pedro pierde el 70%. O si mando del dique nivelador de Cata Montaña por el Río Perico que después cae al Río Grande hacia San Pedro y también pierdo más del 60% de agua. Porque no empezamos del principio. Hay un montón de canales del viejo sistema de riego del dique La Ciénaga que tampoco están revestidos, el más efectivo es el Dique Las Maderas".