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Los candidatos radicales tendrán que remar frente a una gestión municipal agotada

Los candidatos radicales al Concejo Deliberante dicen que llegarán a la función para expresar su responsabilidad con la ciudad. ¿Qué quieren decir? ¿Qué los actuales concejales de su mismo partido han sido irresponsables en la gestión?

En efecto, han destacado su compromiso de abordar las deficiencias y responsabilidades que han caracterizado a algunos de sus colegas en el Concejo Deliberante. Esto refleja un intento de presentar una alternativa seria y comprometida con la ciudadanía, enfatizando su voluntad de remediar las falencias que han afectado la gestión municipal los propios concejales oficialistas…

Este tipo de declaración no sólo busca conectar con los votantes a través de un mensaje de cambio y renovación, sino que también implica un reconocimiento de que ha habido problemas en la gestión anterior, tanto por parte de aquellos que buscan renovar sus bancas, como de quienes no serán parte del concejo. Al posicionarse así, los candidatos radicales intentan consolidar su imagen de agentes de cambio, listos para asumir la responsabilidad que consideran que sus predecesores no han cumplido. Lo que ocurre aquí en realidad es que hay un modelo político que está agotado tanto en la provincia con en la capital.

La percepción de que se han perdido recursos económicos significativos en sueldos altos y que, al mismo tiempo, no se han solucionado los problemas esenciales de la ciudad, puede afectar la confianza de los ciudadanos en nuevos candidatos de la misma agrupación.

En que radica el fracaso de los concejales radicales. Concretamente, en negarse a presentar informes claros sobre el uso de fondos, en no detallar como se están utilizando los recursos y mostrar un compromiso real con la rendición de cuentas, en negarse a establecer los canales previstos en donde los ciudadanos pudieran expresar sus preocupaciones y recibir respuestas. Los concejales cooptados por el departamento ejecutivo nunca propusieron plazos específicos para resolver los problemas…solo promesas y más promesas…

La decepción con los radicales es muy grande pero también natural son demasiados años en el poder combinados con tropelías de todo tipo y la gente está muy cansada de vivir mal. De modo que la clave radica en si los nuevos candidatos podrán demostrar, a través de propuestas concretas y acciones medibles, que están dispuestos a asumir esta responsabilidad de manera efectiva a la luz de la gran decepción de los vecinos de la ciudad. Sin acciones tangibles será muy difícil que estos señores recuperen la confianza perdida.

La responsabilidad va más allá de un simple eslogan de campaña. Implica un compromiso real de aquellos que buscan representar al pueblo. ¿Qué medidas concretas están dispuestas a implementar? ¿Cómo piensan abordar las quejas acumuladas de los ciudadanos que han sido ignoradas durante tanto tiempo?

Los nuevos candidatos deben demostrar que no solo están allí para cumplir con un rol, sino que están comprometidos a escuchar y actuar. Esto significa iniciar diálogos abiertos con la comunidad, establecer mecanismos claros para la rendición de cuentas y asumir la responsabilidad por el uso de los recursos públicos.

La responsabilidad con la ciudad y sus habitantes comienza con un cambio de mentalidad en la gestión pública y un interés genuino por solucionar los problemas que nos afectan a todos. ¿Cómo se hace cuando simultáneamente observamos que el municipio ha abandonado la gestión y sino escuchemos lo que dice Amelia de Dios candidata a concejal por el Frente Somos Más?

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