Raúl Galán (1913-1963)
Al adentrarse en la literatura, Raúl Galán advirtió que su tierra natal le ofrecía la posibilidad de indagar en las grandes y eternas inquietudes de la sensibilidad humana.
Galán sabía describir a Jujuy y a través de ello describía al mundo.
Compartimos algunos poemas:
LA CIUDAD
En las lomas del aire, las palomas;
en las ramas del viento, las retamas.
Tocando con su cuerpo cielo y ramas
Jujuy está dormido entre sus lomas.
Dios mío, me parece que te asomas
y vienes a decir cuánto nos amas
mientras Jujuy se quema entre las llamas
de un lapacho encendido por tus bromas.
Aquí mi casa está. Está mi casa,
aunque no tengo casa en esta villa.
¡Para qué quiero casa de argamasa!
La hice con mis versos en la orilla
del río que entre peñas canta y pasa.
¡Venid todos a ver, qué maravilla!
SOY DE TIERRA
Soy de tierra y de vino y de pan
y de pecado y de dolor.
En esta carne está Satán
y está la débil lágrima en que descansa Dios.
LA PUNA
El viento aquí maldice la fortuna
que a duro bramadero lo condena
¿No es su grito de toro lo que suena
En los roncos erquenchos de la Puna?
Aquí la soledad, una por una,
ha sembrado sus penas en la arena.
¿No es acaso un retoño de la pena
La azucena marchita de la luna?
Es tan rara la luz de estos lugares
y la sal de los yermos en la altura
que parece mentira los tolares
¿Qué perversa deidad, que diosa oscura
se ha puesto a imaginar estos altares
de piedra en soledad y desventura?