San Benito o San Benito de Nurcia es celebrado alrededor del mundo el 11 de julio de cada año. Es un santo que tiene millones de devotos en todas partes del mundo y es muy relevante para la Iglesia Católica. Fue el fundador del monacato occidental y es patriarca de los monjes de Occidente, como también patrono de Europa.
7 impresionantes milagros de San Benito que te sorprenderán
La vida y obra de un santo que marcó al catolicismo y la organización de sus religiosos; además, una forma de invocar su ayuda en tiempos de necesidad.
Fue un monje que tras varios años de reclusión y una vida ajena a los lujos decidió salir al mundo a unir a los religiosos bajo un mismo amparo divino. Hoy se celebra su vida y obra, cuya influencia llega hasta nuestros días.
San Benito: cuál es su historia
San Benito nació en el año 480, en Nursia, Italia. De acuerdo a la Agencia Católica de Informaciones- ACI Prensa, vivió sus años de juventud en Roma, donde estudió filosofía y retórica. Más tarde, buscó alejarse de los lujos y la vida licenciosa de la ciudad y se recluyó en la ciudad de Enfide, actual localidad de Affile, para dedicarse con mayor profundidad al estudio y la disciplina ascética. A los 20 años, todavía en búsqueda de un lugar de mayor plenitud, se trasladó hasta el monte Subiaco para vivir en absoluta soledad.
Vivió un tiempo en una cueva y después se convirtió en un ermitaño. Años después, como parte de su búsqueda, se unió a los monjes de Vicovaro, quienes lo eligieron como su abad en virtud de su espíritu disciplinado.
Como abad en Vicovaro encontró las primeras dificultades en su camino, debido a que algunos de los religiosos no compartían su disciplina y conspiraron contra él al nivel de intentar envenenarlo, evento que al fallar lo alejó de ese lugar.
Acompañado de sus primeros fieles, Benito se dedicó a la fundación y organización de otros monasterios por diversos lugares de la Europa central, entre los que destacó el construido en Monte Cassino, en Italia. Con el objetivo de propagar una misma consigna de fe y de hábitos, escribió su famosa Regla, un texto de preceptos que sirvió para establecer un ambiente de comunidad y orden en los monasterios, como también hacer de ellos una verdadera institución de formación humana y religiosa.
“El monacato europeo [tal cual lo impulsó San Benito] sirvió de base para la expansión de la cultura cristiana en el viejo continente. La red de monasterios repartidos por todos lados fue semilla de los sistemas educativos y se convirtió en la reserva cultural de Occidente. La mayoría de ciudades importantes de la Europa de hoy surgieron alrededor de algún monasterio, o se organizaron siguiendo su ritmo e inspiración”, explica la ACI.
La medalla de San Benito es una de las más antiguas de esta religión. El santo recomendaba a sus discípulos usarla para vencer tentaciones, ahuyentar a los malos espíritus y esperar eventos milagrosos. A lo largo de la historia hubo varios hechos que, para los fieles, demostraron su poder santo.
La medalla cuenta con dos lados, uno con la imagen de San Benito y la otra con la cruz. En la primera, a ambos lados del santo se lee: “Crux Sancti Patris Benedicti”, que significa “Cruz del Santo Padre Benito”.
Se puede ver también una copa de la cual salen una víbora y un cuervo. De manera circular aparece la oración “Eius in obitu nro. praesentia muniamur”: “A la hora de nuestra muerte seamos protegidos por su presencia”. En la parte inferior central se lee: “Ex. S. M. Cassino MDCCCLXXX” (Del Santo Monte Cassino 1880).
En el reverso, en los alrededores de la cruz, estas son las letras y sus significados:
- C.S.P.B.: “Cruz del Santo Padre Benito”.
- C.S.S.M.L.: “La santa Cruz sea mi luz” (crucero vertical de la cruz).
- N.D.S.M.D.: “Que el dragón infernal no sea mi guía” (crucero horizontal).
En círculo, comenzando arriba hacia la derecha:
- PAX: “Paz”.
- V.R.S.: “Retrocede, Satanás”.
- N.S.M.V.: “No me aconsejes cosas vanas”.
- S.M.Q.L.: “Es malo lo que me ofreces”
- I.V.B.: “Traga tú mismo tu veneno”.
Estos son los 7 milagros de san Benito de Nursia
1. Rompió un vaso lleno de veneno al bendecirlo con la Señal de la Cruz
El abad de un monasterio cercano murió y los monjes de ese convento pidieron a San Benito asumir el puesto y convertirse en su nuevo abad. San Benito era más estricto que el abad anterior y en poco tiempo los monjes llegaron a odiarlo. Por lo que decidieron matarlo y pusieron un poco de veneno en su copa de vino. Pero cuando él hizo la señal de la cruz para bendecir el vino, la copa se rompió de repente como si una roca hubiera sido lanzada contra ella.
2. Salvó a un hombre de ahogarse al convertirse brevemente en otra persona
Un monje llamado Plácido estaba tomando agua del lago, accidentalmente cayó al agua y fue arrastrado rápidamente por la corriente. A pesar de que Benito se encontraba a una buena distancia del lago, milagrosamente supo lo que había sucedido y de inmediato ordenó a otro monje llamado Maurus correr hacia el lago para salvar a Plácido. Cuando Maurus llegó al lago – sin pensarlo- corrió sobre la superficie del agua, agarró a Plácido por el pelo y lo arrastró hasta la orilla.
Y aquí es donde las cosas se ponen todavía más extrañas. Hablando sobre el evento más tarde ese mismo día, Maurus insistió en que difícilmente había estado consciente de caminar sobre el agua mientras lo hizo.
¿Y Plácido? Él afirmó que la persona que lo había sacado del agua en el medio del lago no llevaba puesta la ropa de Maurus, sino la de san Benito.
3. Leía la mente de sus monjes
Algunos de sus monjes fueron enviados a entregar un mensaje a otra ciudad. Durante el tiempo del viaje, Benito les ordenó ayunar, como era su costumbre. Pero el viaje duró un poco más de lo que esperaban y alguien les invitó a su casa para una buena comida y ellos aceptaron. Cuando regresaron, él inmediatamente les preguntó dónde habían estado comiendo.
Cuando le respondieron que no habían comido en ningún lugar, san Benito les dijo donde habían comido, lo que habían comido y cuantas bebidas habían tomado.
4. Resucitó a un niño
Durante un proyecto de construcción en la abadía, el mismo satanás vino a San Benito y le dijo que planeaba atacar a los monjes que trabajan en el proyecto. Benito inmediatamente, envió un mensaje de advertencia a los trabajadores. Tan pronto como llegó el mensaje, una pared parcialmente terminada se colapsó sobre un niño pequeño que estaba ayudando con el trabajo, causándole la muerte.
Golpeados por la pena, los monjes trajeron el cuerpo muerto y mutilado a Benito, quien puso el cadáver del pequeño en una mesa, sacó a todos de la habitación y comenzó a orar. Milagrosamente, el niño volvió a la vida y su cuerpo fue sanado de todas las lesiones.
5. Movió una enorme piedra con su oración
Algunos monjes estaban ocupados construyendo nuevas celdas en la abadía y se encontraron con una enorme piedra que bloqueaba el camino de la construcción. Incluso trabajando todos juntos, no fueron capaces de mover la piedra.
Llamaron a san Benito, y él dijo una oración y ellos fueron capaces de mover con facilidad la piedra.
6. Exorcizó a un demonio obstinado
Un hombre de un pueblo cercano estaba poseído por un demonio y su obispo local no pudo exorcizarlo. Finalmente, el obispo llamó a Benito, quien invocó a Nuestro Señor Jesucristo en oración e inmediatamente liberó al hombre del demonio.
Benito le dejó al hombre dos reglas a seguir para evitar otro ataque demoníaco:
1. Abstenerse de comer carne el resto de su vida
2. No tratar de entrar en el sacerdocio
7. No se inmutó por el engaño del diablo
Durante una construcción, Benito pidió que los monjes cavaran un agujero profundo en un determinado lugar. Los monjes encontraron un viejo ídolo de bronce. Por alguna razón, uno de los monjes puso el ídolo en la cocina; no con la intención de adorarlo, sino sólo como un lugar para ponerlo.
De repente, un incendio masivo se desató en la cocina. Preocupados de que el fuego pudiera engullir toda la construcción, los monjes llamaron a san Benito, quien dijo que no veía ningún fuego.
Cuando los monjes insistieron que la cocina estaba en llamas, Benito se dio cuenta de que las llamas eran un truco del diablo para asustarlos– un truco que era totalmente ineficaz en él.
Él oró para que los monjes fueran liberados del engaño y rápidamente lo fueron.
Qué oración rezar para pedir la ayuda de San Benito
Tal como indica la ACI, esta es la oración para invocar a San Benito y pedirle una gracia:
Señor Dios Nuestro, que hiciste al abad Benito, esclarecido maestro del Divino Servicio, concédeme por su intercesión la gracia que te pido. También te pido, que prefiriéndote a ti sobre todos los lujos, avancemos por la senda de tus mandamientos con el corazón contrito, y rezando y trabajando con amor como él hizo. Por Cristo Nuestro Señor.
Amen.