Después de más de un año de haber sido anunciado, el Gobierno finalmente dio inicio este martes por la mañana al Consejo de Mayo, el cual busca acordar políticas públicas y proyectos de ley acordes con lo firmado por el presidente Javier Milei y 19 gobernadores en el Pacto de Mayo. Este cuerpo multisectorial fue inaugurado en un encuentro en Casa Rosada que duró algo más de una hora y que estuvo encabezado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en su carácter de presidente del Consejo.
El Gobierno inauguró el Consejo de Mayo: vínculo con la oposición para mantener las reformas
El cuerpo multisectorial está presidido por Guillermo Francos. El oficialismo busca consensuar los próximos proyectos de ley, a días de que se les terminen las facultades delegadas.
Allí lo acompañaron los seis consejeros designados por decreto: el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, por el Ejecutivo; el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, por las provincias firmantes del Pacto de Mayo; la senadora nacional, Carolina Losada, por la Cámara Alta; el diputado nacional, Cristian Ritondo, por la Cámara Baja; el secretario general de la UOCRA, Gerardo Martínez, por los sindicatos; y el presidente de la UIA, Martín Rappallini, por el empresariado.
Todos los actores involucrados reiteraron al carácter inaugural que tuvo la reunión y que se esperaban encuentros posteriores para comenzar con diálogos y políticas más estructurales, en línea con las consignas rubricadas en el Pacto de Mayo.
El Consejo de Mayo fue anunciado por Milei el 25 de mayo del año pasado. Allí detalló que tendría la responsabilidad de trabajar en proyectos de ley que materialicen los principios adoptados en el Pacto de Mayo, el cual consta de 10 cláusulas adheridas por 19 gobernadores (menos Buenos Aires, Formosa, La Pampa, La Rioja y Tierra del Fuego):
- inviolabilidad de la propiedad privada,
- equilibrio fiscal innegociable,
- reducción del gasto público,
- educación con alfabetización plena y sin abandono escolar,
- reforma tributaria,
- rediscusión de la coparticipación federal,
- explotación de los recursos naturales del país,
- reforma laboral moderna,
- reforma previsional
- y apertura al comercio internacional.
Los integrantes del Gobierno son todos referentes -de diferentes sectores- con los que el Gobierno tiene buen vínculo.
La elección de Martínez como representante de los gremios no es casual. Es uno de quienes mejor diálogo tiene con el Gobierno, que se inspiró en el modelo de cese de la UOCRA para la modernización laboral que impulsó la Casa Rosada el año pasado. Al llegar a la reunión, el sindicalista indicó que iba a las mismas consignas que viene impulsando la CGT y que dijo en la OIT, donde repudió la “imposición de un techo a la negociación salarial” y la “criminalización de la protesta”. Rappallini, en tanto, fue escueto y habló de que, además de la laboral, “son muchas las reformas que hay que abarcar para transformar la Argentina”.
En cuanto al ámbito estrictamente político, Cornejo es uno de los gobernadores que tiene más diálogo fluido con la Casa de Gobierno, aunque por estas semanas se está terminando de negociar si es viable una alianza política en Mendoza, algo que parece probable, pero que no está exenta de tensiones relativas.