Según expusieron los denunciados, se trata de otro lamentable proceder del gobierno que con estas acciones busca disciplinar y criminalizar la protesta.
Desde el Consejo de Pueblos originarios Llanka'J Maki, Jorge Angulo, expresó al respecto, "Recibimos una gran cantidad de contravenciones, tanto las organizaciones como los referentes que conformamos este plan de lucha y que venimos desde hace tiempo tratando de instalar una mesa de diálogo con el gobierno".
"Cuando vemos logrado que se instale esta mesa de diálogo, el jueves a la tarde nos empiezan a llegar las citaciones", señaló.
"Fue sorpresivo para nosotros que en nuestras casas se presenten ocho, diez policías, patrulleros, todo para entregar las notificaciones. Cuando no se pudo hablar con la familia buscaron a los vecinos, o han dejado la notificación pegada en las paredes".
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Las contravenciones se deben a una protesta que se dio el pasado 15 de diciembre bajo la consigna "Por una Navidad sin Hambre", en la cual las organizaciones cortaron los puentes que se ubican sobre el Xibi Xibi, obstaculizando el tránsito. La notificación menciona además que la convocatoria no respetó las normas sanitarias vigentes.
Más allá del incumplimiento a las medidas recomendadas, las marchas constituyen una muestra de que la crisis económica excede al temor por la pandemia. Las organizaciones salieron a la calle a reclamar trabajo digno y ayuda para los comedores y pese a que por un lado lograron abrir canales de diálogo, por otro reciben estas sanciones que sientan precedente para disciplinar al resto.
Cabe preguntarse si con ello se busca desalentar los reclamos que vayan contra la gestión o que cuestionen sus políticas.
Angulo consideró, "no es novedoso que en Jujuy se criminalice la protesta, no es novedoso en Jujuy el autoritarismo, que se avasalle constantemente y que se utilice a la policía para reprimirnos y para meter miedo".
"No nos van a correr del eje y agotaremos todas las instancias de diálogo a pesar de estas cuestiones".
El Consejo de Pueblos originarios Llanka'J Maki, participó de la marcha del 15 de diciembre para reclamar al gobierno dos cosas, dijo Angulo. Una es la voluntad política para discutir 10 mil puestos de trabajo, y la otra, tierras para vivir y producir.
"Es meter la mano donde entendemos que no les gusta pero una decisión que hemos tomado es que vamos a seguir discutiendo esta problemática con el Estado, pero también denunciar los atropellos", finalizó.
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