Mediante una reconversión integral de su formato tradicional, la 6° edición del Festival Internacional de Cine de las Alturas presenta 41 producciones durante diez días a pura virtualidad, al punto tal que este año son los espectadores quienes ocuparán el rol de “jurado online”.
Con un sinfín de actividades suspendidas por causa de fuerza mayor, la Fiesta Nacional de los Estudiantes como la más destacada, el evento que reúne piezas fílmicas de los países cordilleranos se convierte en la vedette de septiembre.
Pero por más buena que sea la iniciativa el árbol no debe tapar el bosque. Con una curva de contagios por coronavirus en franco ascenso y funcionarios que hace tiempo rascan el fondo del arca provincial ¿Será este el momento oportuno para derivar fondos públicos hacia el Festival?
La última semana no existieron intervalos entre manifestaciones, ruidazos, movilizaciones, bocinazos y cuanto formato de protesta exista. El patrón común: sueldos precarizados, un gobierno con extrañas prioridades, faltante de elementos de protección personal, descuentos inconcebibles.
Como sucede con muchas áreas del gobierno provincial, encontrar datos precisos sobre fondos y su destino resulta casi imposible. Durante la presentación del evento, el ministro de Cultura y Turismo Federico Posadas, a duras penas dejó entrever que “el presupuesto equivale a un 10%” comparado con ediciones anteriores ¿A cuánto equivale? Una total incógnita.
El Cine delas Alturas mantiene sus gastos “bajos y en silencio”
Si bien desde el gobierno se excusaron del gasto asegurando que apenas se utilizó una décima parte del presupuesto que habitualmente se ocupa en el festival, en diálogo exclusivo con El Disenso la diputada Alejandra Cejas aseguró que a través de un Decreto Ampliatorio se llevó el presupuesto original de $18.521.171 a un total de 30 millones, hecho que expuso oportunamente en la Legislatura.
Intentar un relevamiento documental sobre la responsabilidad y alcance del Ente Autárquico en materia presupuestaria se convierte en un acto casi utópico.
Puede hallarse entre los boletines oficiales la conformación, es decir cargos y escalafones del mismo; también la incorporación del capital designado en el “Fondo Unificado de las Cuentas de la Provincia”. La herramienta dispuesta por el Ejecutivo provincial para coordinar discrecionalmente los fondos de las reparticiones que componen la administración pública.
Está claro que el artículo 2 del decreto ha venido como anillo al dedo para Facundo Morales, quien administra el Ente "con autonomía financiera y funcional" incluso esquivando el abrazo codicioso que su propio padre impuso un año atrás (vía Legislatura) sobre el restante 99% del erario jujeño.