Córdoba se suma a la tendencia nacional de "ficha limpia"

Córdoba es otra de las provincias donde se impulsa la ley de “ficha limpia”, para conocer candidatos en profundidad y garantizar al electorado que quienes se postulan a ejercer cargos públicos no tienen ningún impedimento legal para hacerlo.

El legislador de esa provincia, Gregorio Hernández Maqueda, comentó la iniciativa, indicando que siempre fueron “militantes de toda la legislación que proteja al estado y la ciudadanía de la corrupción, y una norma que prohíba ser candidatos a personas condenadas en dos instancias, que hayan cometido delitos dolosos, de pena de prisión de todo tipo, es una norma importante para tratar de reconciliar a la sociedad con sus representantes y terminar con esta idea de que uso los fueros y el estado como guarida de impunidad, que me convierte en una casta, palabra de moda, separada del resto de la sociedad, mientras que a cualquier trabajador que tiene antecedentes se le dificulta conseguir un trabajo. No puede ser que para los máximos representantes políticos eso no ocurra. Creemos que es importante que Córdoba se sume. Ahora ya son siete las provincias que tienen esta norma de idoneidad y ética pública que se popularizó bajo el nombre de “ficha limpia”.

Voto informado

“Intentamos un proyecto de la red “Ser Fiscal”; el proyecto hace que cualquier candidato deba acompañar su currículum con las motivaciones por las que quiere ocupar el cargo, los proyectos que impulsará, para ir a un voto informado. Después, el ciudadano decidirá si quiere investigar o no, pero por lo menos, que se cumpla con ese requisito. El ciudadano que quiera, que pueda conocer cuál es el currículum y las propuestas de los candidatos. Se trata de reconciliar a dirigentes y dirigidos o representantes y representados. Esa es la base de una república: la igualdad ante la ley. Algunos circunstancialmente ocupamos una carga pública y es un privilegio, pero para que ese privilegio no se vuelva un acto de corrupción, tiene que estar dotado de estos mecanismos de garantías, para no traicionar la voluntad del electorado y prestar un servicio”.

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Materia prima

“La materia prima de “Ficha Limpia” son las sentencias condenatorias penales, por lo tanto, nuestro sistema se basa en la confianza en los jueces y la independencia. Si no tenemos jueces independientes, que se animen a condenar cuando haya pruebas, a personas poderosas, que normalmente son candidatos electivos votados, de nada sirve la “ficha limpia”. Si a la justicia la maneja el poder político de turno, naturalmente no tendremos sentencias condenatorias firmes, de dos instancias, y por lo tanto, quedamos como que luchaos contra la corrupción porque sancionamos “ficha limpia” pero después los únicos condenados son los enemigos del poder de turno, quienes no están protegidos por el Poder Judicial, que normalmente está manejado muy firmemente por el poder político. De hecho, el tribunal superior de justicia de Córdoba, el máximo tribunal de la provincia, es un tribunal adicto al poder político, no es independiente, y a la vez muy permisivo en términos de la intensidad con la que ejerce el control”.

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Debilitamiento

“Esto genera debilidad institucional que hace que luego haya menos inversiones, y si hay menos inversiones, hay menos trabajo digno y, por lo tanto, aumenta la pobreza. Cada vez más se sabe que a falta de institucionalidad, de independencia del Poder Judicial, termina empobreciendo a la población”.

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Como un pulpo

“Nuestro sistema tiene que tener poder ejecutivo fuerte pero que no pretenda controlar y dominar todos los otros poderes y poner, como un pulpo, un tentáculo en el Poder Legislativo, uno en el Judicial, uno en los medios de comunicación, uno en los partidos políticos, uno en el sector privado, uno en las asociaciones intermedias o sociedades civiles. Que el Poder Ejecutivo no sea un caudillo, sino un mero ejecutor de las leyes que dicta el Poder Legislativo. Que el sector privado tenga autonomía, que no se vea apretado ni condicionado, ni extorsionado a cambio de coimas para el poder de turno, o a cambio de que le liberen regulaciones o no le pongan regulaciones que lo asfixian,. De la pobreza se sale con el sector privado, con el ahorro, el riesgo, la innovación, el esfuerzo. El generador de riqueza es el sector privado, y el público tiene que limitarse a garantizar el orden, justicia, seguridad, previsibilidad, e igualdad de condiciones para competir. La justicia es el árbitro. Cuando alguien comete una falta, el árbitro tiene que ser objetivo, imparcial e independiente. Si el poder de turno controla, como ocurre en Córdoba, el Poder Judicial, la población, los trabajadores, los emprendedores, carecen de ese refugio, garantía, guardián, y se rompe la lógica de incentivos para comerciar, emprender, ahorrar y generar puestos de trabajo”.

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