Semanas atrás se concretó un reclamo de trabajadores del que ahora es ex Banco de Desarrollo de Jujuy.
En la protesta denunciaban hace seis meses que no cobran en tiempo y forma y hace dos meses no les pagan los haberes.
La mirada está puesta en el presidente de la entidad, Marcelo Fernández quien habría firmado unas adendas que solo benefician a las casas de juego y además habría deuda con la obra social de los empleados.
Son alrededor de 130 trabajadores afectados, y algunos dependen exclusivamente de ese salario. La situación del organismo es crítica y por eso solicitan su renuncia.
El propio Fernández reconoció que hubo irregularidades. Se defendió de las denuncias de los empleados y en conferencia informó que desde el Banco Central los intimaron para cambiar el nombre de la institución. Culpó a la oposición por la problemática situación que atraviesan.
Pasaron los días y el conflicto persiste. Este jueves se concretó un “abrazo simbólico” de los trabajadores en las instalaciones para volver a exponer su malestar.
Sergio Gastón Torres, interventor y parte del consejo directivo nacional de la Asociación Bancaria indicó: “Esta medida es en resguardo de los puestos de trabajo de los compañeros del banco, en esta oportunidad venimos a dar esta triste señal a nivel social”.
“Le pedimos al gobernador que tome las decisiones necesarias y ponga personas idóneas en el cargo. Hablar de desarrollo es hablar de crecimiento sostenido en el tiempo y eso no ocurre”, relató.
