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Abogado afirma que con la justicia controlada "todos estamos en libertad condicional"

Alberto Nallar criticó al primer gobernador provincial asegurando que debería ser juzgado por incumplir sus funciones de funcionario público. También comentó las denuncias contra el Fiscal general, Sergio Lello Sánchez.

  • El abogado Alberto Nallar criticó la postura política de Gerardo Morales indicando que extorsiona a electores a votar por Sergio Massa.
  • También sostuvo que el Poder Judicial es afín de los deseos del gobernador de Jujuy, luego de las acusaciones al Fiscal Sergio Lello Sánchez.

Desde su condena por haber sido encontrado culpable de sedición e instigación a la violencia, el abogado local Alberto Nallar redobló sus críticas y ataques al gobernador Gerardo Morales, repudiando sus aspiraciones políticas y afirmando que el Poder Judicial es funcional a los deseos del primer mandatario jujeño.

El letrado también comentó las denuncias contra el fiscal general Sergio Lello Sánchez realizada por el Juez de Control Jorge Zurueta, destacando que éste último haya comenzado el proceso legal.

“Como yo también tengo cuestiones graves vinculadas a denuncias contra el Poder Judicial me pareció muy bueno que haya habido ya un juez que se anime a plantear públicamente lo que vengo denunciando desde 2015: la cooptación del Poder Judicial de parte de Morales. El sometimiento del Poder Judicial a sus designios, que logró a través de una maniobra alucinante: al tercer día hábil de su gobierno duplicó el número de miembros del Superior Tribunal al haber designado en esos cargos a cuatro subalternos suyos, y sumado esos cuatro a una que ya estaba en el cargo: la ex diputada Langhe de Falcone. Lograron la mayoría absoluta que disciplinó a los cuatro miembros que venían ejerciendo de hace años en el Superior Tribunal y eso permitió disciplinar al resto del Poder Judicial. El 17 de diciembre también crearon el Ministerio Público de la Acusación, que paradójicamente podemos denominar “paralelo”; “para Lello Sánchez” y la Fiscalía del Superior Tribunal. De esta manera quedaron todos los fiscales subalternados a Lello Sánchez, y los jueces subalternados a este Superior Comité Radical de Justicia que se mantiene hasta hoy. Declaré esto en estos mismos términos ante el juez Puig, que presidió el tribunal que me condenó a 3 años y medio de prisión. No estoy desacreditando, difamando ni poniendo o exhibiendo rencores ni nada que se le parezca, me siento en la obligación de denunciar estas irregularidades en el ámbito judicial, porque de la Justicia dependemos todos. Y hoy la Justicia, al depender de Morales, nos coloca a todos en una situación de libertad condicional”.

Alberto Nallar habló de la denuncia al Fiscal General, Sergio Lello Sánchez

“Que lo haga un juez es sumamente importante porque esto revela la situación de indefensión en la que nos encontramos todos los jujeños: o nos sometemos a Morales o Morales nos somete a sus designios para lo cual cuenta con una mayoría brumadora en el Superior Tribunal de Justicia. Tiene todos los fiscales a su cargo por intermedio de Lello Sánchez”.

“Estas causas no prosperarán, no tengo la más mínima esperanza de que pueda revertirse la condena que me impusieron, como que no hay la más mínima posibilidad de que prospere la causa del juez Zurueta. No es lo mismo denunciar cuando se modifican las circunstancias y está todo favorable a uno, hay que denunciar en el momento que se debe denunciar, a pesar de los peligros que esto significa. No tengo la más mínima duda de que esto significará algún dolor de cabeza al juez Zurueta, como viene siendo el hecho de no haberse sometido a los designios de Lello Sánchez, que no son otros que los de Morales. El contenido de las denuncias que formula el juez, más allá de que me parecen absolutamente verosímiles, la gravedad de las denuncias y el riesgo que corre al formularlas me permite creer que se trata de hechos reales. A eso se suma que también mencionó situaciones análogas en cabeza de otros dos jueces que no salieron a desmentir la situación. Creo que esta es la gran oportunidad: todos aquellos que conservaron su dignidad dentro del Poder Judicial para salir a hacer este tipo de planteos, porque no debemos olvidar que el sometimiento del Poder Judicial de parte de Morales es causal de intervención federal, que en algún momento, de un modo absolutamente irregular, planteó el senador Snopek. No existe intervención federal del Poder Judicial. El artículo 6 de la Constitución habla de intervenir el territorio de la provincia: se intervienen los tres Poderes. Intervenir el Poder Judicial y dejar a quien lo usurpó en Casa de Gobierno, en la poltrona mayor del Poder provincial, denota la inequívoca decisión del senador Snopek que no se interviniera nada”.

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Hoy votar a Massa es votar a Morales. No queda absolutamente nadie dentro del Partido comercial del Justicialismo que no esté siendo cómplice de Morales en toda esta maniobra. Por supuesto, el problema más grande que tenemos es que, en 2015, el Partido Renovador Federal hizo una alianza con Morales que le permitió acceder al gobierno. Esa alianza se mantuvo hasta el día de la fecha, al punto de que escuché a Massa enviarles saludos fraternales desde dos actos públicos. Morales llegó al extremo de extorsionar a 100.000 empleados públicos y sus respectivas familias de que, si ganaba Milei, no se iban a cobrar sueldos en forma indefinida. Esa extorsión es un delito por el cual no solamente deberían haber salido a perorar Snopek y compañía, debieron haber salido a denunciarlo como dice el Código Electoral Nacional. Se trata de una extorsión para dirigir el sentido de los votos. Ese es un delito penal que se debe denunciar ante juez federal. ¿Dónde están los Snopek? Cuando me refiero a los Snopek en su apellido involucro a Moisés y al resto. Jamás los vi pelearse con Rivarola; lo que pasa es que ellos son los guerreros de la sonrisa: lo único que hacen es maquillarse para dar la mejor sonrisa en los afiches que pegan en la calle, pero a la hora de la verdad, cuando tienen que salir a defender al pueblo, están absolutamente ausentes”.

Me siento muy afectado por la utilización del término “peronista”; nací en el peronismo, vengo de La Juventud Universitaria Peronista, milité toda la vida en el Peronismo, mi trabajo social da cuenta de mi ideología, pero no considero que a mi ideología la compartan Snopek, menos Rivarola y el resto. Quisiera que hablemos del Partido Justicialista en el sentido que hay mucha gente peronista que hoy se siente agraviada por el hecho de quienes utilizan el sello del peronismo no se pronunciaron en contra del enemigo social n° 1 que tenemos en la provincia, que se llama Gerardo Morales. Cuando digo enemigo estoy hablando de quien se apoderó del Poder Judicial para someternos a todos. Soy la encarnación de lo que digo. Haré pública la sentencia para que no vaya a parecer que estoy ocultando algún elemento, que fue lo que tuvieron en cuenta para otorgarme una condena justa. Haré pública la sentencia para que sepamos todos cuál fue la actitud de los jueces para imponerme una condena. Otra cuestión es la denuncia de Zurueta: cuando advierto que estos personajes, enloquecidos por obtener la prórroga de una pensión que se les otorga en el Senado de la nación, en la Cámara de Diputados, en la Legislatura, es una pensión porque no hacen absolutamente nada. Desafío a todos ellos que me hagan una pequeña enumeración de las acciones en las que se jugaron por los intereses del pueblo y se opusieron en la calle a Morales como lo hicimos varios que no tenemos cargos fueros, dietas, asesores ni diez pasajes por mes a Buenos Aires”.

“Lo que Gil Lavedra no podrá disimular es el grave delito que cometió Morales al postularse, ser designado e incorporarse como convencional constituyente: el delito que dice que el funcionario que no cumple con los deberes impuestos por la ley tiene pena de prisión e inhabilitación, incumplimiento de los deberes de funcionario público. Los incumplió. La Constitución tiene tres prohibiciones expresas que se lo impedían, tanto la anterior como la reformada, que le impedían ser convencional constituyente. Cuando la Constitución dice “prohibido” no hay Poder Legislativo que lo absuelva de esa prohibición. El señor Otaola que fue el presidente del Superior Tribunal de Justicia y presidente de la Junta Electoral que lo habilitó, junto a Morales que asumió como convencional constituyente, cometieron un grave delito que invalida todo lo actuado en la convención constituyente y por ende la reforma misma. Hasta la persona más desinformada con solo leer dos renglones donde dice “prohibido ejercer cualquier otra función mientras dure el mandato de gobernador” se dará cuenta que incumplió con el deber de funcionario público”.

Se trata de un delito común que debemos denunciar; el problema grave que tenemos es que no lo podemos denunciar acá porque Morales conduce el Poder Judicial. Se rompió el sistema republicano la división de poderes”.

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