El Centro de Atención Primaria para la Salud (CAPS) de la localidad tiene serias limitaciones para dar cobertura a la población de la zona. Imposibilitados para conseguir atención médica en su pueblo, los residentes deben pagarle a personas que les reserven un lugar la noche anterior o viajar a la vecina provincia.
Un caso registrado recientemente, y que afortunadamente no terminó en tragedia, expone esta complicada realidad en el CAPS local.
El último lunes, feriado nacional, un niño de un año y medio sufrió un accidente al caer de cabeza a un tacho con agua mientras jugaba, lo que provocó que se ahogue. El padre del pequeño lo llevó de urgencia a la salita pero la misma se encontraba cerrada.
Embed - Aguas Calientes: su hijo sufrió un accidente, acudieron al CAPS y estaba cerrado
Desesperado, comenzó a gritar y policías acudieron a su auxilio. Realizaron maniobras de RCP y salvaron al menor de edad que hoy sigue internado, mejorando levemente.
Daniel Flores, papá del nene, contó lo que vivió en ese momento: “Se cayó, yo lo agarré y lo llevé urgente al CAPS y estaba toda cerrada la salita, no había nadie. Nosotros gritamos por la policía que vino y llamaron a la ambulancia. Querían llevarlo a Güemes pero como decían que era feriado estaba todo cerrado. Yo quería abrir a patadas la sala de la desesperación, por suerte los policías me ayudaron”.