- A nueve meses de sus promesas, el intendente de Palpalá se acordó de poner en condiciones la Terminal de Ómnibus.
- Los trabajos incluyen pintura, recambio de pisos, vidriado y mejora de las instalaciones.
Iniciaron las obras en la Terminal de Palpalá tras siete años de abandono
Debieron pasar siete años para que la clase política palpaleña se decidiera a darle una lavado de cara a la Terminal de Ómnibus, una de las más importantes de la provincia, pero de casi nulo mantenimiento. El óxido en los techos fue tapado, al igual que los pedidos de informe elevados en el Concejo por el destino de los fondos presupuestados para tal tarea durante las últimas dos administraciones.
La Terminal de Ómnibus de Palpalá, inaugurada durante la última etapa del gobierno de Alberto Ortiz estuvo técnicamente abandonada, esencialmente por la falta de interés de sus sucesores. Por su ubicación estratégica considerada la carta de presentación a la ciudad, pero descuidada sin explicación valedera por las siguientes administraciones públicas por un tiempo excesivamente prolongado que alcanzó el record de 7 años sin refacciones integrales.
Entre los hitos medianamente recientes, su estructura edilicia alberga dos cajeros automáticos Macro en el extremo cercano a la playa de estacionamiento, funcionando desde el año 2016, sumamente concurridos por los usuarios y el Centro de Monitoreo en el primer piso cuya inauguración data del 2019, parte de un ambicioso plan de seguridad que todavía está lejos del objetivo inicial: poseer 300 cámaras operativas generando una red interinstitucional con la secretaría de Seguridad y Policía de Jujuy. Cabe recordar que allí también funcionan uno de los pocos servicios de encomiendas de la ciudad.
Después de larga espera, se puede constatar un trabajo acorde a las necesidades de vecinos y turistas. Según (re) anunció la intendencia incluye "mejora de las instalaciones, cerramiento con vidriado y recambio del piso", además de un trabajo de pintura que ya puede verse sobre los otrora oxidados techos. Aunque nada fue dicho sobre el recambio de luminarias, anticuadas y muchas de ellas fuera de funcionamiento.
Sobre qué sucedió con los fondos presupuestados en 2021 por un monto de $280.000. Parece que nunca lo sabremos a pesar de los pedidos de informe elevados oportunamente por el concejal Rubén González, cuyo plazo de respuesta de 10 días fue ignorado. Por el contrario Rubén Rivarola (h) respondió con un anuncio de cartón. Acompañado de sus funcionarios hizo una evaluación del edificio y promesas de mejoras, que recién llegarían nueve meses después.
No es de extrañar, por que retrocediendo aún más en el tiempo, la misma incógnita pero a escala millonaria había quedado pendiente de respuesta ¿Qué pasó con el convenio alcanzado entre provincia y municipio, firmado por Pablo Palomares y el ex ministro de Infraestructura Jorge Rizzoti en 2019? El paquete de mejoras destinado a la ciudad siderúrgica por $20.000.000 millones incluía un apartado para mantenimiento y terminación de la terminal por $1.400.000 nadie respondió en su momento y parece haber quedado en el olvido. Durante ese lapso el oxido ganó terreno, los sanitarios apenas estaban funcionales y sucedieron varios robos de elementos en los baños.
Tomando en cuenta que el actual intendente realizó el mismo tipo de anunció en noviembre del año pasado y finalmente no ocurrió. Los palpaleños deberán estar atentos para ver si finalmente consiguen la terminal que tanto merecen y tanto le han negado sus eventuales líderes politicos.