Un basural en expansión se advierte en la unión entre la Ruta Nacional N°66 y la Ruta provincial N°1, camino a Palpalá. Desde artefactos electrónicos hasta restos de escombros y animales muertos, conforman una postal de desidia y abandono.
Una impresionante cantidad de residuos se advierte a la vera de lo que es la unión entre Ruta Nacional N°66 y Ruta provincial N°1.
Desde artefactos electrónicos, residuos orgánicos, escombros y restos de animales muertos, que tristemente conforman una postal de la desidia y abandono.
En un recorrido realizado por JujuyalMomento, una mujer que recicla objetos para realizar artesanías se acercó para señalar que hace poco más de una semana dicho sector estaba limpio, sin embargo de un día para el otro comenzó a colmarse de basura.
La llegada del mes de agosto interpela a los jujeños a reflexionar sobre el cuidado de la tierra, la naturaleza y el medio ambiente, cuestión que también debería ser llevada a la práctica y no sólo en esta época del año sino siempre.
Si bien buena parte de la responsabilidad le cabe a la política ambiental de cada municipio, también cada vecino debe hacer su parte.
En la ciudad de Palpalá la situación particular que está provocando la generación de basurales a cielo abierto, tiene que ver con la falta de recolección de residuos en algunos sectores.
Ya es un problema que se volvió frecuente. El camión no pasa y la gente en su afán de deshacerse de los restos los arrojan en cualquier descampado.
Esto a su vez genera un gran perjuicio para todos, porque convierte a estos lugares en zonas propicias para toda clase de alimañas y enfermedades.
