El 5 de noviembre, por esas mágicas coincidencias del destin, nacieron dos de los más grandes referentes del folklore jujeño: Ricardo Vilca y Amaranto Chañi; figuras que marcaron para siempre la historia cultural de la provincia.
En el mes de la música, con una energía compartida y la misma vocación de enseñar, ambos artistas dejaron una huella imborrable en generaciones de músicos, alumnos y amantes de la cultura popular.
Sus métodos, su sensibilidad y su compromiso siguen vivos hoy en cada niño, joven o adulto que continúa aprendiendo bajo su inspiración.
Un grupo de amigos, difusores y amantes del folklore impulsa una iniciativa que busca institucionalizar el 5 de noviembre como el “Día del Folklorista Jujeño”, en reconocimiento al legado de estos dos grandes maestros y a todos los cultores de la música popular de la provincia.
La creación de esta fecha especial pretende consolidar un espacio permanente de valoración cultural, con actividades educativas y artísticas que fortalezcan la identidad provincial y mantengan viva la esencia de nuestras tradiciones.

 
  
