La violencia se apodera de la vida de las personas, lo que resulta en un aumento de la delincuencia. Esto lo vemos y lo escuchamos a diario en esta Jujuy.
El narcotráfico y el fracaso de la política
Cuando no hay acceso a educación y la droga se introduce en los barrios, se producen infinidad de situaciones que afectan no solo el presente sino también el futuro de la sociedad.
También hay que tener en cuenta que el uso de drogas tiene consecuencias negativas para la salud física y mental de las personas, las adicciones son muy costosas de tratar y tenemos un Estado que no está dispuesto a hacerse cargo.
El abuso de drogas también tiene efectos devastadores en las familias y en la comunidad en general, incluyendo la pérdida de empleos, la desintegración de las familias y el deterioro de la calidad de vida.
La presencia de drogas en un barrio conduce a un aumento de la pobreza, la falta de oportunidades laborales y educativas, lo que a su vez perpetúa el ciclo de la droga y la delincuencia en la zona.
La falta de educación y la introducción de drogas en un barrio tiene efectos devastadores en la salud, la seguridad y la calidad de vida de la comunidad en general.
Cuando hablamos de drogas es fundamental hacer anclaje en los jóvenes y en los chicos. Sus consecuencias son tan graves que lleva a una pérdida de esperanza y perspectivas de futuro.
Las drogas hacen que los jóvenes pierdan la necesidad de mantener relaciones saludables, su desempeño académico desaparece, la futura vida profesional de esfuma y por supuesto dejan de existir las metas a largo plazo.
Además, el uso de drogas también conduce a problemas legales, sociales y financieros, lo que puede resultar en un aumento de la exclusión social y la estigmatización.
La pérdida de esperanza y motivación en los jóvenes, genera una desesperanza aprendida, un fenómeno en el que los jóvenes se sienten incapaces de cambiar su situación actual.
Es importante destacar que no todos los jóvenes que consumen drogas pierden las esperanzas, y que el apoyo social y la intervención temprana pueden ayudar a prevenir o revertir esta situación.
Es necesario que los jóvenes tengan acceso a programas educativos y de prevención sobre el uso de drogas, así como a servicios de apoyo para aquellos que ya están experimentando problemas relacionados con el consumo de drogas.
Hay varias razones por las cuales el poder político no está involucrado en la lucha contra el micro tráfico de drogas, algunos podrán argumentar que la lucha contra el micro tráfico puede requerir una gran cantidad de recursos y personal, y algunos gobiernos pueden no tener los recursos suficientes para implementar medidas efectivas contra el microtráfico.
A veces, los intereses políticos pueden influir en la toma de decisiones sobre la lucha contra el micro tráfico, algunos políticos pueden estar más interesados en garantizar el apoyo de ciertos grupos de votantes o mantener relaciones políticas con ciertos grupos de interés que en abordar el problema de la droga.
Pero también hay que decir que la corrupción es un factor que impide que el poder político aborde el micro tráfico de drogas de manera efectiva. La corrupción hace que los funcionarios públicos se involucren en el tráfico de drogas o protejan a los traficantes a cambio de sobornos o favores políticos.
También los políticos pueden no estar conscientes de la gravedad del problema del microtráfico de drogas y pueden no verlo como una prioridad en su agenda política.
Es fundamental que la política deje de pensar por un momento en su propio futuro y por lo menos haga el intento de prevenir la introducción de drogas en los barrios populares y para ayudar a aquellos que ya están experimentando problemas relacionados con el consumo de drogas. Esto incluye la educación, la prevención, la intervención temprana, el tratamiento y la rehabilitación para aquellos que luchan con la adicción y el abuso de sustancias.
Sabemos que la penetración de las drogas en una sociedad tiene consecuencias graves y duraderas, todavía hay futuro para una sociedad que está luchando contra este problema. La prevención, el tratamiento y la recuperación son posibles, y las comunidades pueden trabajar juntas para abordar el problema del uso y abuso de drogas.
Para lograr un futuro positivo, es importante que la sociedad reconozca el problema del abuso de drogas y tome medidas concretas para abordarlo, la educación sobre el uso y abuso de drogas, la prevención, la intervención temprana, el tratamiento y la rehabilitación para aquellos que están luchando con la adicción.
También es vital que se aborden las causas subyacentes del problema, como la falta de oportunidades, la pobreza, la exclusión social y económica, la falta de acceso a servicios de salud mental, entre otros factores.
Además, es necesario que se trabaje en la “desestigmatización” de la adicción y en la promoción de la empatía y el apoyo social para aquellos que están luchando con el problema. Con el tiempo, estas medidas pueden ayudar a reducir la penetración de las drogas en la sociedad y mejorar el futuro para todos los miembros de la comunidad.