Lorena Madregal, y Catalina, esposa e hija de José Luis Iramaín, respectivamente, volvieron a reclamar justicia por la muerte del hombre, fallecido tras haber sido atropellado por un conductor en estado de ebriedad.
Fueron doce ocasiones en que estuvieron en Plaza Belgrano exigiendo celeridad en la investigación y el comienzo del juicio por la muerte de José Luis y aún no obtienen respuestas.
Lorena dijo que próximamente terminaría la etapa investigativa y que el acusado sigue en libertad, sin tener aun fecha oficial del comienzo del juicio. Catalina volvió hace pocas horas a Jujuy desde su lugar de residencia por estudios y se siente cada vez menos triste y más molesta por la detención de la causa.
“Tenemos que hacer marchas y pedir que la gente haga su trabajo. El fiscal le prometió a mi mamá que habrá otra detención porque el juez de control rechazó la primera. Quieren averiguar dónde vive el acusado y no saben; la madre del hombre tampoco. Si está desaparecido pensamos que no está en la provincia”.
Temen que quien atropelló a su padre y marido esté prófugo porque nadie sabe dónde está, y piensan que pueden haberlo cruzado en la calle sin haberlo identificado, pero les duele que aun camine libre. Ven y dialogan con otras familias en su situación y se preguntan “qué hacen los que deberían hacer su trabajo, por qué estamos marchando, por qué no podemos tener un proceso de duelo en paz”.
La feria judicial no está lejos, y Lorena contó que algunas autoridades, arriesgando una fecha muy optimista, dijeron que el juicio por la muerte de José Luis podría comenzar a fines del año que viene.
