El vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció este miércoles que el Gobierno enviará al Congreso los pliegos de 150 jueces, Fiscales y Defensores del Pueblo. Lo hizo junto al secretario de Justicia, Sebastián Amerio, quién dio detalles de la iniciativa.
El Gobierno anunció el envío al Senado de los pliegos de 150 jueces, fiscales y defensores
Lo anunció el vocero presidencial, Manuel Adorni, junto al secretario de Justicia, Sebastián Amerio. Los candidatos deberán ser aprobados con el acuerdo de dos tercios del Senado.
“Este Gobierno recibió una pesada herencia, con una vacancia del 30% de jueces y del 50% de fiscales, lo cual hacía imposible que el sistema funcionara correctamente. Es como jugar un partido de fútbol con tres jugadores menos”, detalló Amerio durante la habitual conferencia de prensa de Adorni.
En un comunicado posterior, el Ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, resaltó que “esto se logró con un solo representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, Sebastián Amerio, quien está realizando un excelente trabajo”.
Durante la conferencia de prensa, Amerio explicó que todos los candidatos a jueces que enviarán al Senado "pasaron previamente por una selección que realiza el Consejo de la Magistratura en la que se juzga su idoneidad para ocupar el cargo”.
Cómo es la negociación para los nombramientos
Según informaron fuentes del Gobierno, los senadores pretendía elegir a la mayoría de los 150 jueces, fiscales y defensores, a cambio de aprobar los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, los candidatos propuestos por el Ejecutivo para la Corte Suprema.
El Gobierno no lo aceptó. “Querían poner la mayor cantidad de jueces a cambio del voto por los jueces de la Corte. Era destruir todo. La lista que trascendió es fake. Es un listado del Consejo de la Magistratura", le dijo a Ámbito una fuente del Gobierno.
La intención del oficialismo es enviar todos los días al Senado entre 20 y 25 pliegos de jueces. De esta manera, en ocho días hábiles lograrían remitir la mayoría. Sin embargo, existen algunos pequeños problemas burocráticos y políticos que podrían conspirar con estos tiempos.
El inconveniente burocrático tiene que ver con los requisitos de documentación para armar las postulaciones. Para remitir los pliegos se les debe pedir a los candidatos la declaración jurada y actualización del currículum, pero algunos todavía no lo hicieron.
Otro de los problemas es de carácter político. El Gobierno no tienen un solo interlocutor en el Senado con el cual negociar, lo que dificultaría alcanzar los acuerdos necesarios.