La vicepresidenta Cristina Kirchner habló ante una multitud este jueves 25 de mayo, al cumplirse 20 años de la asunción de Néstor Kirchner como presidente, inaugurando el ciclo kirchnerista que marcó las primeras décadas del siglo XXI en Argentina. Lo hizo ante una plaza colmada por su militancia, desde un escenario con 300 invitados, entre los que sobresalieron las figuras del ministro de Economía, Sergio Massa, y el del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, situados uno al lado del otro, justo atrás de la principal oradora.
Críticas a la Corte, acuerdo con el FMI y crisis: las frases de Cristina Kirchner en Plaza de Mayo
La vicepresidente brindó un discurso de poco más de una hora en el acto del 25 de Mayo, ante una multitud, sin entregar definiciones electorales.
Con un estado del tiempo lluvioso, su discurso inició antes de lo previsto y duró una hora. En él desarrolló, como lo viene haciendo, ejes de un futuro programa de gobierno para la próxima gestión, aunque sin entregar definiciones electorales en sentido alguno. A menos de un mes del cierre de las listas de candidatos, el Frente de Todos dilata la postulación de la fórmula presidencial que representará al oficialismo en las elecciones de este año.
A continuación, algunas de las principales frases del discurso de Cristina Kirchner:
“Hace exactamente 20 años que llegábamos con Él a esta misma plaza, en la que 30 años antes habíamos estado. Ese país que recibió aquel presidente patagónico de apenas 22% de los votos. No lo duden que sigue viviendo en el corazon del pueblo, como sigue viviendo cada argentino y argentina que le dio dignidad a este pueblo. Ese país que recibió venía de una gran crisis”.
“En estos tiempos en los que se habla tanto en contra del Estado, que hace falta uno pequeñito, que no moleste, quiero contarles que cuando Él llegó el Estado, después de la crisis de 2001, era así de chiquitito. Quiero compartirlo con ustedes porque es necesario ante tanta confusión, armada premeditadamente, que llevemos a todos los rincones de la patria, en cada barrio, escuela, a la calle, que cuando él llegó el Estado era así de chiquitito, pero la deuda externa que le habían dejado era así de grande”.
“Cuando decidimos en 2008 la recuperación de Aerolíneas Argentinas el Estado le pagaba a la empresa española los salarios y el combustible de los aviones. Pese a la fama de buenos administradores de los privados, ahí no fue así. Tampoco con las AFJP. No se jubilaba nadie pero cobraban bancos y administradores 12 mil millones de dólares durante los años en los que jubilarse no era un derecho”.
“A la patria hay que tomarla sin beneficio de inventario, hay que comprenderla y amarla completa. Estamos en esta plaza, que poblada de represión a madres y abuelas, el día que se caía la convertibilidad y se apropiaban de los depósitos a plazo fijo en el famoso corralito de aquel señor calvo y de ojitos claros. Cuando hoy vemos y escuchamos a quienes eran discípulos y colaboradores de ese ministro explicarnos lo que van a hacer, porque nosotros no entendemos de economía como ellos, quiero decirles que fuimos kukas los que pagamos los depósitos a plazo fijo con el Boden 12. Que no es una oferta para ir al shopping, es el bono que se le entregó a cada uno de los que cuando fueron a buscar los dólares y los pesos a los bancos no estaban. Esos dólares que se quedaron los genios de las finanzas los pagaron los kukas, Néstor y Cristina”.
“Cuando el compañero llegó a presidente de la República, el PBI era de 164 mil millones de dólares, cuando su compañera entregó el gobierno el 10 de diciembre de 2015, era de 647 mil millones de dólares. Pagamos durante 12 años y medio 100 mil millones de dólares de deuda que no habíamos contraído nosotros. ¿Fue magia? no, el modelo de construcción de la sociedad, de valor agregado, de inclusión social, de buenos salarios, no es pecado pagar buenos salarios, al contrario, es de buenos cristianos”.
“Son números inobjetables. Muchos dicen que mi segundo gobierno no fue tan bueno como el de Néstor. Tengo claro que es porque fue cuando más plata ahorraron los trabajadores”.
“No es que fueron 12 años fáciles. Es el otro argumento, ´tenían todo a favor´. A los 3 meses de asumir como presidenta, por otro genio de la economía (por Martín Lousteau) casi me pongo el país de sombrero. Fue algo muy fuerte, en esta misma plaza, en aquella crisis que sinceramente dividió a la sociedad, una crisis política de magnitud”.
“Después en 2008 una sequía. Es algo redundante siempre en la economía Argentina. Entre 2008 y 2010 perdimos millones de cabezas de ganado. Un dirigente social se acordaba que en nuestra sequía colgaban a las vacas y decían esto es culpa de Cristina”.
“Cuando uno ve las principales economías que han surgido en los últimos 30 años, en Asia, no sólo China, lejos están de la doctrina que nos quieren imponer acá. Son modelos de acumulación acordados entre el sector público y privado en los sectores que más retorno provocan y por lo tanto mayor incorporación de tecnología, de valor agregado y de trabajo calificado. Esa es la discusión que están esperando los argentinos y no las boludeces que se dicen en los medios de comunicación”.
“Créanme que para una militante política de mi generación haber, después de tres periodos de gobierno, podido decirles a los argentinos que le dejábamos un país mucho mejor que el que habíamos recibido era una muestra de orgullo. Más allá de las dificultades, porque tampoco era Disney”.
“Todos saben las diferencias que he tenido y que tengo, lo dije en La Plata, va a haber crecimiento, terminaba la pandemia, pero ojo cuiden los precios de la economía porque si no el crecimiento se lo van a llevar cuatro vivos. Y pasó. Se lo están llevando cuatro vivos. Porque aún, a pesar de los errores, este gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri”.
“Créanme que para hacerlo (distribuir el ingreso) muchas veces hay que ponerle carita fea a los que tienen más. ¿O porqué se creen que en mi segundo gobierno pudimos llegar al 51% (de distribución)? Por qué creen que me odian, me persiguen y me proscriben. Así me quieran matar, soy del pueblo, nunca de ellos, del pueblo y de ahí no me muevo”.
“Si no logramos que ese programa que el FMI impone a sus deudores sea dejado de lado y nos permita elaborar un programa propio de crecimiento, industrialización e innovación tecnológica, va a ser imposible pagarlo. Cuando Néstor decía los muertos no pagan decía eso. ¿Se creen que lo van a poder pagar con commodities? A los commodities los regulan los flujos financieros y siempre los acomodan para que sigas debiendo. Fue un préstamo político y política tiene que ser la solución”.
“Tenemos que abrir la cabeza y mirar lo que les decía hace un rato, cómo en otras economías desarrolladas se articula lo público y lo privado. Tenemos recursos extraordinarios gracias a los kukas, también tenemos Vaca Muerta. Recuperación kuka. Litio. Materiales raros. Que vengan a explotarlos y no digo que los autos los hagan acá, pero por lo menos una parte de la batería hacela acá hermano, si te la estas llevando toda”
“Cuando escucho algunos dirigentes a los que respeto, ponerse contentos porque en Bolivia y en Chile impulsaron legislaciones que cuidan el litio y dicen ´ah, bueno, porque les ponen muchas exigencias allá, se van a venir todos para acá´ ¡Qué vocación de ser Potosí!. ¡Ponete en la cabeza ser Corea, no Potosí!”.
“Es necesaria una renovación de ese pacto democrático. Volver a darle al país un Poder Judicial que se ha evaporado entre las tramoyas de una camarilla indigna para la historia de la Argentina. Tenemos que repensar el sistema institucional argentino. No podemos seguir con la rémora monárquica de personas que son designadas de por vida y que nunca más rinden cuentas a nadie, ni a nada, no se saben sus declaraciones juradas, no se sabe dónde viven, que tienen, eso no es de república ni de democracia”.
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