En este sentido, desde la fiscalía le indicaron a Diego Reyes, hermano de la víctima que viajó desde Jujuy hasta Catamarca, que el examen de ADN recolectado en el lugar del crimen era positivo y que pertenecían a su familiar, por lo que ya fue incorporado al expediente. Según dijo la fiscal del caso, el caso podría llegar a juicio en marzo del próximo año.
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Recordatorio en el lugar donde hallaron los restos calcinados.
Hay que recordar que por este crimen, la ex pareja de Fernando, Danna Martínez también oriunda de nuestra provincia se encuentra detenida e imputada por el delito de "homicidio triplemente calificado por alevosía, por mediar una relación de pareja y por el concurso premeditado de dos o más personas". Además, Simón Alcides Toranzos y María Villagra están acusados por el delito de "homicidio agravado por alevosía y concurso premeditado de dos o más personas".
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Familia y amigos del jujeño Fernando Reyes.
El pasado domingo, en medio de una conmovedora ceremonia, se realizó una misa en el lugar donde se hallaron los restos cuyo ADN confirmó que se trataban de los del hombre desaparecido desde diciembre del año 2022.
A la vera del río ubicado en el paraje La Ciénaga, del departamento catamarqueño Belén, también familiares, amigos y conocidos de Reyes colocaron una cruz como recordatorio del padre de dos niños y a modo del pedido de justicia que solicitan.
El caso
Fernando Reyes de 39 años desapareció misteriosamente de su casa en el paraje La Ciénaga de Catamarca a principios de diciembre del año 2022, donde residía junto a su pareja Danna Martínez y sus dos hijos. Ellos se habían instalado en una casa que les alquiló José Cruz, cerca de la ruta 40, quien fue clave para descubrir toda la trama.
Por aquellos días, Fernando quedó en encontrarse con el hombre que le arrendó la propiedad, pero Reyes jamás llegó a cumplir su cita. Cuando Cruz se acercó para saber qué había pasado, Danna le comentó que su marido había conseguido un trabajo en La Rioja y que tuvo que marcharse del lugar. En otra ocasión, la mujer dijo que su marido había vuelto a Jujuy y hasta que se habían separado. El dueño de la propiedad no creyó en la versión y comprobó él mismo que Fernando jamás regresó a su provincia natal. Incluso, llegó a escribirle a la familia del desaparecido para alertarlos de que algo había ocurrido.
Finalmente, Cruz se animó y el viernes 5 de mayo denunció la desaparición de Reyes ante la comisaría del departamento de Belén, cuya investigación quedó en manos de la fiscal de la Tercera Circunscripción Judicial, Marina Villagra. La funcionaria montó un operativo de búsqueda en la zona.
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Fiscalía a cargo de la investigación por el crimen en Catamarca.
Un día después de la denuncia encontraron restos óseos en inmediaciones del río Belén y la fiscal ordenó la inmediata detención de Martínez. Menos de 24 horas después, la División Canes marcó un punto a unos 400 metros de la vivienda que la pareja compartía y encontraron la bolsa con el cuerpo calcinado de Reyes. Con el descubrimiento de los huesos quemados, la sospechosa se quebró y confesó la autoría del homicidio.
Pero no fue lo único que dijo. Danna, en su declaración, intentó justificar el hecho y le dijo a la fiscal que lo había asesinado porque supuestamente era víctima de violencia de género. En ese sentido, la mujer dijo que golpeó a Reyes durante una fuerte discusión y que por las lesiones, el hombre falleció. Para ocultar lo que hizo, incineró el cadáver en una fogata a cielo abierto. Un testigo después le indicó a la Justicia que por esa fecha observó llamas en el lugar.
Los investigadores además pudieron establecer que, aparentemente, la sospechosa no actuó sola y tuvo la complicidad de dos personas: María del Valle Villagra, una amiga, y un presunto amante identificado como Simón Alcides Toranzo.
