- Fecha para reconocer a quienes, con paciencia y dedicación, enseñan no solo a nadar sino también a superar miedos, cuidar la salud y disfrutar del agua con seguridad.
- una jornada que busca poner en valor la tarea de quienes transmiten conocimientos, disciplina y confianza en el agua.
- Formadores de deportistas y personas seguras en un ámbito que también implica prevención.
13 de septiembre, Día Mundial del Profesor de Natación
Cada 13 de septiembre se celebra el Día del Profesor de Natación, una fecha dedicada a homenajear a quienes dedican su tiempo y esfuerzo a enseñar esta disciplina, indispensable no solo como deporte sino también como habilidad de vida.
¿Por qué es importante esta fecha?
-
Para valorar el rol educativo y social que cumplen los profesores de natación, tanto con niños como con adultos. Enseñar a nadar significa también enseñar seguridad en el agua, confianza, disciplina y salud.
Porque la natación aporta numerosos beneficios físicos y mentales: mejora de la capacidad respiratoria, coordinación motora, resistencia, reducción del estrés, mejor postura, etc.
Porque en muchos casos romper el miedo al agua es un paso muy grande para quienes recién empiezan, y el acompañamiento de un buen profesor marca la diferencia.
¿Qué hace un profesor de natación?
-
Enseñar técnicas de nado: brazadas, respiración, coordinación cuerpo-agua.
Adaptarse a distintos niveles: clases para principiantes, para quienes nadan más avanzado, clases terapéuticas o de rehabilitación si corresponde. Ayudar a mejorar la seguridad: enseñar normas de uso de la pileta, alertas al nadar en aguas abiertas, supervisión, entre otros. Motivar, ser paciente y tener sensibilidad para con quienes tienen miedo o dificultades.
El Día del Profesor de Natación es más que una efeméride deportiva: es un pequeño recordatorio de la importancia de tener guías que enseñen habilidades que salvan vidas, que fomentan salud y que construyen confianza. Que quienes bucean, chapotean o simplemente floten puedan hacerlo con seguridad y disfrutando del agua es también mérito de quienes enseñan. Siempre hay un “profe de natación” detrás de cada brazada firme, de cada miedo vencido bajo el agua y de cada sonrisa tras el primer largo verdadero.
Te puede interesar
-
- MAIMARÁ
- EN SAN PEDRO

