De esta forma, la estrategia oficial se orienta a dosificar los ajustes con el doble propósito de no afectar la recomposición del salario real y al mismo tiempo continuar con el proceso de descenso de la inflación.
Las mediciones del INDEC vienen mostrando una recuperación del poder adquisitivo en los últimos meses. Los datos correspondientes a mayo arrojan una variación mensual del salario de 8,3%, por encima del incremento de la inflación, que fue de 4,2%. Sin embargo, en la comparación interanual los salarios subieron 216% contra una suba del índice de precios de 276%, de donde se registra una caída en términos reales de los salarios de 16% cuando se los compara con mayo de 2023.
Dado el peso que tiene el consumo, se considera que la recomposición del poder adquisitivo es el elemento clave a los efectos de frenar la caída de la actividad económica y comenzar un proceso de recuperación.
Por otra parte, los indicadores de alta frecuencia que manejan las consultoras privadas arrojan que en las últimas semanas el proceso de desaceleración de los precios se vio tensionado, entre otros factores por la suba en los dólares financieros.
Con este aumento acotado de las tarifas, se interpreta que el Gobierno sigue dando una señal en cuanto a que mantiene su objetivo de que la inflación converja al 2% mensual.
FUENTE: Ámbito