“Pensar diferente al gobierno te hace enemigo del gobierno provincial, y para poder conseguir algo tenés que estar alineado al gobierno. Pero no vamos a alinearnos, ni a este ni a ninguno”.
En los barrios más carenciados, sostuvo, es donde se percibe mejor el trabajo de organizaciones sociales, y de no haber esa labor, considera que “empezarían a morir muchos niños y causaría un estallido social. Eso hubiera sucedido si no hubiéramos estado hace años sosteniendo merenderos y comedores a pulmón. Y lo seguimos haciendo”.
Por otro lado, considera que la ayuda llegaría a estos organismos barriales si en ellos se trabajara para la campaña presidencial de Gerardo Morales.
"Las organizaciones sociales hemos evitado un estallido social con nuestra asistencia"
Persecución y planes
Como Unidad Piquetera, contó que presentaron notas y pedidos de ayuda en reiteradas ocasiones a la Ministra de Desarrollo Humano Natalia Sarapura, y solo consiguieron persecución policial y represión.
Corregidor opinó además que los casi 82.000 planes Potenciar Trabajo, y otros planes provinciales que maneja el Ejecutivo provincial, sirven para tener control de todos los aspectos y estratos sociales.
“(Morales) quiere estar a cargo de todo, como lo viene haciendo con la gente que está en el municipio. Muchos que tienen este plan en el municipio intentan venir a las organizaciones sociales porque no les cuentan todas las horas que los hacen trabajar y por el ninguneo que reciben”.
Merenderos de campaña
“En tiempos de elecciones, Morales y Rivarola abren merenderos por dos semanas o una semana diciendo que seguirán estando y después los cierran. Pasan las elecciones y el hambre sigue quedando”, aseguró Corregidor.
Asimismo, dijo que cuando solicitan asistencia para los comedores y merenderos que manejan, les responden que no alcanza para todos, que no se pueden sostener y no hay mercadería.
“Después ves camionetas entregando bolsones en tiempo de elecciones. Cuando hay elecciones hay cosas para el pueblo, cuando no las hay, no hay nada”.