Durante la Semana Mundial de la Lactancia Materna, se resaltan los diferentes beneficios que otorga una alimentación con leche materna para un bebé y, a posterior de este tiempo, la complementación con otros alimentos. Dar la teta es una de las medidas que más favorece el pleno desarrollo físico e intelectual de los recién nacidos y para toda la vida.
La leche materna beneficia la microbiota intestinal del bebé
Comenzó agosto y comenzó la Semana Mundial de la Lactancia Materna, fecha importante para recalcar la importancia y los múltiples beneficios de amamantar. Especialista médico gastroenterólogo pediatra habló al respecto.
Si bien la lista de beneficios de la leche materna es cada día más extensa, uno de los menos conocidos es el que favorece el desarrollo saludable de la microbiota intestinal y las consecuencias que tendrá en la vida de ese recién nacido.
Para conocer más al respecto, Radió 2 conversó con Omar Tabacco, médico gastroenterólogo pediatra y ex presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría, quien explicó que la microbiota es el conjunto de bacterias, levaduras, hongos, virus y otros microorganismos que se alojan en el intestino, destacando que no hay que pensarlas como algo que enferma, sino que al contrario, traen beneficios al largo plazo.
Tabacoc destacó que la alimentación en los primeros 1000 días de vida (desde la concepción hasta los 2 años) son trascendentales en la vida de todo ser humano. Es en este periodo donde se haya una ventana de oportunidad única para el desarrollo físico, la programación metabólica, el neurodesarrollo y la maduración inmunológica.
Ya desde cómo se alimentaron los padres a lo largo de la vida y sobre todo durante el embarazo en la madre y durante la lactancia son factores determinantes del futuro de ese bebé y todo eso se refleja en la microbiota intestinal.
Las bacterias y otros microorganismos en el intestino de un bebé se desarrollan ya en etapa fetal, con bacterias intestinales de la madre y que dan origen a esa colonia, la que se verá nuevamente beneficiada al pasar por el canal del parto para el nacimiento y con un nuevo refuerzo a través de la leche materna.
Las bacterias no siempre son sinónimo de enfermedad. El gastroenterólogo pediatra explicó que el predominio de batecterias, como las Bifidobacterium y Lactobacillus, se benefician por los prebioticos naturales que aporta la leche materna.
Todo esto se verá reflejado, con los meses y los años, en una salud óptima, con un desarrollo saludable del sistema digestivo, inmunológico y metabólico.
Finalmente, el ex presidente de la SAP, destacó que incluso cuando la mamá se saca leche y almacena para alimentar luego al bebé y que va a necesitar calentar luego, aunque mate las bacterias, esto no resta beneficios.
Aun cuando la leche sea entibiada para darle luego al bebé, los restos de esos microorganismos alimentaron las bacterias del intestino.