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Sadir – Álvarez García: la primera fórmula en campaña

La campaña en Jujuy recién está empezando a calentar los motores para un 2023 que promete ser por demás intenso, y en este contexto no son pocos los que pretenden suceder a Morales en la primera magistratura provincial.

Por ahora candidatos sobran, no son pocos los que se sienten herederos naturales, pero hasta el momento las encuestas no dan a ninguno con alguna ventaja medianamente razonable.

Todos miden pésimo y esta realidad obliga a redefinir cada día la arquitectura electoral.

El oficialismo parecer que está dejando de lado su vocación frentista, ya que el dominio de la UCR es tan abrumador que no deja espacio alguno para los partidos que le dieron origen a Cambia Jujuy.

Fue una tarea de demolición y ocultamiento que Morales implementó desde el primer día, logrando el cometido de manera hasta escandalosa con la siempre dócil complicidad de alguna dirigencia que veía apacible como sus partidos se iban diluyendo a cambio de alguna prebenda personal.

La vianda por el partido, fue la consigna que llevó a la casi desaparición de Cambia Jujuy como una concertación de gobierno.

El caso más escandaloso es el del PRO, que siendo el partido del presidente durante cuatro años, nada hizo para intentar al menos crecer como espacio político integrante de la concertación. El PRO local se dejó cooptar arteramente y no solo desapareció como expresión política, sino que su posición dentro de Cambia Jujuy quedó reducida a solo un socio tributario menor.

Tan es así que siendo el partido del presidente durante cuatro años, el PRO solo se limitó a colaborar con las relaciones políticas propias y de esa manera asegurarle al Morales un infinito caudal de dinero para la provincia.

Algunos esperaban una reacción del PRO cuando apenas 24 horas de que Macri dejara el poder, Morales, muy suelto de cuerpo apareció en los medios desconociendo al ex presidente y tomando una inmoral distancia de su gobierno.

Inclusive ahora también llama la atención la actitud del PRO, habida cuenta que Morales está repartiendo codazos y bravuconadas a más no poder para intentar llegar a integrar una formula como candidato a vicepresidente de algún presidenciable del PRO.

Ni siquiera legítimamente aprovechar esta ventaja política para hacer respetar al espacio en la provincia y se conforman con una vianda y funcionar como mayordomos del Morales.

Pero el PRO no es la única víctima del mandatario jujeño, también lo son todos los partidos que integran la concertación.

Tal es así que desaparecieron de la escena política, que por estas horas la discusión a futuro solo está centrada en lo que decida Morales para terminar de acomodar a sus amigos radicales. Para los socios ni justicia.

Cada vez que se habla de las eventuales formulas gubernamentales, lo único que suenan son referentes radicales, es más, en la propia sede de la UCR y en las cocinas políticas, de lo único que se habla es de la supuesta necesidad que tiene el radicalismo de cooptar todos y cada uno de los espacios en el 2023, y que para los socios apenas algunas viandas menores pero siempre muy lejos de los lugares de decisión.

Para algunos radicales, los socios de la concertación ya cumplieron ciclo y sus dirigentes bien pagados con cargos intrascendentes y de menor cuantía, que ya no son necesarios para continuar en el poder al menos por otros cuatro años más.

Dicen que están absolutamente decididos en continuar en esta empresa, a punto tal que por estas horas podemos afirmar que ya está en la arena electoral la primera formula.

Se trata de la que postula al actual ministro de hacienda Carlos Sadir, hombre que desde el momento mismo en que Morales declina ocho años más, comenzó a sonar en los pasillos del palacio de calle San Martín.

En el comité radical sostienen que Sadir picó en punta, por más que guarde un locuaz silencio cada vez que es consultado sobre su candidatura, tan es así que ya está en campaña y la prensa de casa de gobierno lo acompaña a cada acto o cada reunión que el hombre de los números mantenga con cuanto dirigente político ande dando vueltas, inclusive hasta recorre los municipios en procura de cerrar algunos acuerdos con vistas a las generales de mayo.

Además en los últimos tiempos está muy activo en referencia a actos oficiales, cosa que no ocurría antes, pero ahora el trabajo está en instalarlo en el conocimiento de los ciudadanos.

La candidatura de Sadir hace tiempo que se viene comentando, lo que nunca se había hablado era sobre su compañero de fórmula, y en los últimos días comenzó a aparecer junto a Carlos Sadir.

Para los entendidos es prácticamente un hecho que Normando Álvarez García sea el compañero de fórmula de Sadir.

Una oferta puramente radical y a decir en los pasillos de Casa de Gobierno, se trata de un binomio decidido por el propio Gerardo Morales.

Por supuesto que con esta fórmula prácticamente confirmada, los ánimos dentro de la UCR comenzaron a caldearse ya que hay otros dirigentes que también tienen la intención de suceder a Morales.

Por ejemplo algunos sectores identificados con Raúl Jorge, insisten en que el alcalde capitalino es el heredero natural que hasta el momento fue sumamente obediente con Morales y no apoyarlo para la campaña gubernamental sería prácticamente un acto de traición.

Si bien es cierto que Jorge hasta ahora no dijo absolutamente nada en torno a su eventual candidatura, también se lo vio singularmente activo, comenzó a aparecer el Jorge candidato, como lo hace disciplinadamente cada dos años.

No hay que dejar de tener en carpeta al jefe comunal de San Pedro, el iracundo Julio Bravo, que también está lanzado a la carrera gubernamental, y para ellos procura conformar una suerte de liga del interior con intendentes, concejales y dirigentes varios para enfrentar a los capitalinos dentro de la propia Unión Cívica Radical.

Candidatos sobran, a punto tal que en los últimos días también apareció levantando la mano Gustavo Bohuid, con una inusitada aunque irrelevante actividad en redes sociales. En los pasillos de la política radical afirman que el ex ministro de Salud también tiene pretensiones.

Mientras tanto, el Partido Justicialista sigue en la faena de intentar colar a Rubén Rivarola en alguna fórmula de Cambia Jujuy.

La idea del PJ es simplemente seguir participando y disfrutando de las miles del poder, pero esta vez desde un espacio formal, ya que hasta ahora la sociedad con Morales era de hecho y en las ganancias, algunas licitaciones a cambio de algunos votos en la legislatura, pero ahora a esa relación la pretenden formalizar con Rivarola en la formula gubernamental.

Algunos bedeles del Rivarola afirman que para seguir manteniendo es status quo económico es fundamental la presencia en la fórmula, ya que caso contrario, ninguno de los eventuales herederos garantiza mantener los acuerdos vigentes.

Que el PJ salga por su cuenta es harto riesgoso, ya que las encuestas que se conocen al día de hoy, apenas le dan algo menos de 5 puntos y si estos números se mantienen el PJ no harían piso y quedaría afuera de toda discusión.

Con un nulo caudal electoral y un bloque absolutamente minoritario, el poder de maniobra quedaría limitado exclusivamente a lo económico, con todos los riesgos que ello implica.

Dicen los que saben que en la mesa de Fredy Morales está el requerimiento de Rivarola, que se limita solo a dos cuestiones, ser candidato a vicegobernador de algún radical y que le mantengan la intendencia de Palpalá.

En el bloque del PJ en la legislatura insisten en que la fórmula ideal es Jorge – Rivarola, lo que no terminan de explicas es ideal para quién?

El lunes el peronismo que esta fuera de la órbita del PJ y de Rivarola inaugura una sede, los que para muchos es el primer pasó de lo que será la campaña 2023.

Guillermo Snopek, Julio Ferreyra, Juan Carlos Martínez entre tantos otros serán los anfitriones de este espacio denominado Unidad por Jujuy, el convite es a partir de las 20 en 19 de Abril 1125.

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