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Como una suerte de ironía involuntaria, días atrás durante una entrevista el gobernador jujeño se vanagloriaba por la correcta administración de los fondos públicos que ha llevado a la provincia al superávit fiscal por segundo año consecutivo. El ministro Carlos Sadir secundaría tales afirmaciones: “En realidad muestra como venimos administrando la gestión, lo que venimos haciendo en materia de recursos y de gastos porque de esto se trata. Los recursos que venimos mejorando y tratar de poner los gastos en su justa medida de manera tal de que sobre pase los ingresos y te ponga en situación de déficit”. Salvo que ningún funcionario explicaría el método empleado para llegar a tal equilibrio.
La sencilla fórmula empleada por el Ejecutivo resulta evidente: los trabajadores dependientes del Estado provincial (más de 90 mil) muchos de ellos precarizados al punto de percibir remuneración por debajo de la línea de indigencia fueron elegidos como mártires fiscales.
Economista explica cómo llega el gobierno a afirmar que hay superávit en Jujuy
“Tiene que ver con un proceso inflacionario en donde la coparticipación representa cerca del 90% de los ingresos creciendo más que la inflación. Se combina con un recorte por el lado de la masa salarial que representa cerca del 60% del gasto total del Estado ya que las paritarias no permiten que los salarios se actualicen siquiera según la inflación”, explica el economista Gastón Remy.
Efectivamente la región NOA/NEA tiene una histórica dependencia de los recursos coparticipables, según un informe del diario económico especializado El Cronista, Jujuy se encuentra en el quinto lugar de las provincias más dependientes con un 86,6% muy por encima de la generación de recursos propios. Apoyando la afirmación de Remy los fondos llegados por esta vía se desglosan aproximadamente de la siguiente manera:
- En 2016 cerca de $24.173.053.970
- En 2017 cerca de $29.295.446.273
- En 2018 cerca de $38.179.710.014
- En 2019 cerca de $53.407.344.609
- En 2020 cerca de $73.095.438.739
- En 2021 cerca de $101.599.383.459
“Es un mecanismo central que permite el superávit, operan también recortes en otras partidas del presupuesto como obra pública. Y un mecanismo secundario que le permite tener caja todos los años y un volumen cercano al total de deuda que se paga anualmente son los ingresos que llegan al presupuesto por la venta de energía del parque Cauchari. No resuelve toda esta ingeniera financiera e inestable pero permite una caja que permite pagar casi toda la deuda”, agrega el referente de la Izquierda en Jujuy.