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Joven jujeño fue al colegio con el rostro hinchado por la golpiza que le dio su padre

Las autoridades del establecimiento educativo secundario de San Salvador de Jujuy, dieron intervención a la Línea 102 y radicaron la denuncia correspondiente. El alumno dijo que su padre lo amenazó si contaba algo.

  • Un joven fue con el rostro hinchado al colegio, por una golpiza que le dio su padre.
  • Las autoridades del establecimiento dieron intervención a la Línea 102 y realizaron la denuncia.
  • El alumno pertenece a un establecimiento secundario de San Salvador de Jujuy.

Un adolescente jujeño fue brutalmente golpeado por su padre, quien además lo amenazó con que si contaba a alguien lo ocurrido "la próxima vez le iría peor", situación descubierta y denunciada por personal del colegio al que el joven asiste.

Si bien el episodio de violencia tuvo lugar el pasado fin de semana, recién durante la jornada del miércoles los miembros de la comunidad educativa del establecimiento secundario de San Salvador de Jujuy al que concurre el joven, tomaron conocimiento por lo que realizaron la denuncia en la Seccional Nº 44 que está a cargo de las actuaciones complementarias.

Si bien el caso se mantiene bajo un estricto hermetismo, la asesora pedagógica de un colegio capitalino, fue informada por personal de servicios generales que un alumno de 15 años se encontraba fuera del establecimiento, con el rostro golpeado e hinchado, no queriendo ingresar a clases.

La mujer, junto al vicedirector de la institución, se dirigieron a un espacio verde donde se encontraba el adolescente quien se excusó de no haber asistido a clases ya que su padre le habría dando una brutal golpiza el domingo con puñetazos en diferentes partes del cuerpo.

Producto de esta agresión, el joven tenía aún el pómulo derecho inflamado y moretones en el pómulo izquierdo.

El estudiante se quebró ante los presentes y dijo que su progenitor le advirtió que si contaba algo, le iba a ir "mucho peor", aportando que no es la primera vez que es víctima de este tipo de violencia y que por temor a represalias, jamás pudo contarlo.

Frente a esto, se dio rápidamente intervención a la Línea 102, desde donde les sugirieron que debían realizar la denuncia policial.

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