- Agropecuario venció a Gimnasia por 2 a 0 en la fecha 32 de la Primera Nacional.
- Los goles fueron anotados por Enzo Aguirre (14' ST) y Rodrigo Mosqueira (42' ST).
- Hinchas increparon a jugadores del Lobo.
- El local fue de menor a mayor pero le faltó claridad.
Gimnasia se desvanece y el sueño de la final se va perdiendo
El Lobo de Módolo perdió 2 a 0 en el 23 de Agosto ante Agropecuario, un equipo práctico que golpeó 2 veces. Otra vez desdibujado futbolísticamente y en un juego accidentado por lesiones, Gimnasia no le encuentra la vuelta en el cierre del torneo, sumando así su tercera derrota al hilo. Al final hubo incidentes.
EL ANÁLISIS DE MÓDOLO
Lejos fue un primer tiempo para olvidar rápidamente. Hubo un cúmulo de situaciones que obligaron a Matías Módolo a agachar la mirada en varios pasajes de este periodo, tratando de buscar respuestas de un equipo accidentado. No es novedad que la producción futbolística tiene un marcado retroceso, incluso esto reconocido por el propio DT, pero la tarde del domingo ante Agropecuario sumo otro factor clave; la lesión de Sánchez, Camacho y Duré sobre el final, mostraron a flor de piel un estado delicado desde lo físico, un estrés deportivo del cual en el final del campeonato el equipo cayó preso.
Palazzo definió mal después de una buena cortina de Menéndez en el área, el ingresado Casa enganchó y su remate se va cerca del poste todo para un periodo, dónde otra vez el equipo quedó en deuda, aunque claro lo planeado por el cuerpo técnico fue imposible mantener por esas lesiones que limitan más al equipo.
En el complemento, Casa erraba un mano a mano inmejorable y en el rebote el balón le quedó retrasado al Chavo Endrizzi. Gimnasia transformaba esa presión lógica localista por situaciones que lo dejaban más cerca de el uno Acosta.
Sin embargo, los de Carlos Cásares le darían un mazazo a la ilusión, a los 15 minutos centro y la cabeza de Enzo Aguirre marcaban el camino de la victoria visitante, gol del Sojero y desacople grupal en el local.
Gimnasia caía preso de un rejunte de situaciones propias del nerviosísmo. Módolo mandó a Fernández a traicionar adelante y a Juárez al lateral por derecha, algo que apriori es tremendamente discutible. Los recursos eran escasos, Gimnasia intentó llegar pero cada ataque fue estéril.
El arquero visitante se lucía mandando una pelota al tiro de esquina, pero la visita sabía que aún faltaba un golpe más y a los 42 minutos Mosqueira sellaba el 2 a 0 final.
En ese momento, parte del público comenzó a dejar las tribunas mientras que el otro sector el más numeroso alentaba a más no poder. Una bomba de gas lacrimógeno en la preferencial encendía las alarmas de que el final sería más que convulsionando.
Antes de la conferencia un hincha le reclamaba en la puerta de vestuario actitud al equipo y la respuesta de los jugadores se hizo escuchar. Todo parecía un manojo de nervios propio de un final para olvidar rápidamente.
Gimnasia dejo pasar otra chance, aunque ese sueño de ascenso aún siga vivo desde lo matemático.
ASÍ INCREPABAN A LOS JUGADORES DE GIMNASIA