El hecho tuvo lugar en la intersección de las calles Alem y Urdininea en el barrio Gorriti, por donde una madre y su pequeña de 10 años caminaban cuando fueron interceptadas por un hombre que les solicitó ayuda, aduciendo que se encontraba enfermo.
En esos momentos, la víctima de manera desinteresada se prestó a auxiliar al sujeto, cuando repentinamente otro hombre se aproximó a ellos, indagando si es que habían encontrado un monedero que supuestamente había extraviado.
Con esta excusa, el segundo estafador revisó las pertenencias de la mujer y su hija, para luego retirarse junto al supuesto enfermo, quien dijo que lo acompañaría para seguir la búsqueda del dinero perdido.
Sin embargo, el único capital que se había extraviado fue el de la colaborativa víctima, quien al revisar su bolso constató que los protagonistas le habían sustraído 65 mil pesos y un teléfono celular.
La damnificada, entonces, se dirigió hasta la Seccional Nº 2 donde radicó la denuncia y cuyo personal se encuentra a cargo de las actuaciones.