- La secretaria general del gremio Obras Sanitarias denunció precariedad total de los servicios que brinda la empresa estatal, Agua Potable.
- Dijo que este magro presente es consecuencia de la gestión de Gerardo Morales y Víctor Galarza.
- Solicitó al actual gobernador, Carlos Sadir, que realice una auditoría general.
"Agua Potable es una bomba de tiempo que ahora está explotando"
Expresó Yolanda Mamani, secretaria general de Obras Sanitarias de Jujuy, en referencia la actualidad de la empresa estatal.
La provincia de Jujuy está declarada bajo emergencia hídrica, la cual fue aprobada por la Legislatura días atrás. Pero más allá de esta situación, desde el gremio de Obras Sanitarias de Jujuy vienen denunciando irregularidades en las gestiones de diversos directivos.
Al respecto, Yolanda Mamani, secretaria general del sindicato, dijo: “Desgraciadamente nos tocó atravesar una realidad que no se veía hace mucho tiempo, pero si a esto le sumamos la precariedad total de los servicios, porque si hay algo que siempre denuncio el gremio es que esta empresa es una bomba de tiempo que ahora está explotando y justo le agarró esta emergencia que fue mayúscula.”
También precisó que: “hace un año y medio que se cambió parte del directorio y ni siquiera se ha empezado a normalizar la precariedad en la que se encontraba la empresa, por eso hoy está explotando todo, la cual es consecuencia de la gestión Morales y Galarza.”
Por otra parte indicó que le solicitó al gobernador Sadir que se realice una auditoría en la empresa, “para que vean como le han metido la mano en el bolsillo a la gente y le devuelvan todo lo que la han robado”.
Asimismo, denunció el malestar de los trabajadores de la empresa Agua Potable SE, “nos han llevado al abismo y de ahí es muy difícil salir, pero tampoco hacen nada para que salgamos. Se liquidan mal los sueldos, a algunos trabajadores les pagan un peso la hora extra, ¿Dónde se ha visto eso?, ya es el colmo la impunidad total de los que manejan los números de la empresa. Encabezado por el vocal contable que es el contador Ramírez y su liquidador Alvarado, el cual está jubilado y aun así sigue trabajando. Lo tienen ahí porque ya tiene los números dibujados y le mete la mano al bolsillo a la gente”, finalizó Yolanda Mamani.