“Nadie es la patria, todos lo somos”, citando el poema de Borges (Oda escrita en 1966) la reconocida historiadora y periodista jujeña Irene Ballatore, iniciaba su participación en Sobremesa (Canal 2), en un intento por cerrar la grieta que divide a los argentinos. Porque más allá de los intentos políticos por monopolizar la celebración, todo ciudadano o residente en Argentina que goce de sus libertades ayer estaba habilitado para sentirse parte de la historia.
El rol de Jujuy en la guerra independentista: las escuelas deben revalorizar la historia local
La historiadora Irene Ballatore visitó Sobremesa ofreciendo una revisión de los acontecimientos que marcaron la historia de nuestra república, el día posterior a la celebración por el 213° aniversario de la Revolución de Mayo.
Los hechos acontecidos aquel lluvioso 25 de mayo, nos remontan más de dos siglos atrás, pero guardan reminiscencias con el presente, “peor que las diferencias sobre un proyecto de país, sería el silencio o la falta de identidad”, reflexiona Ballatore. Hay un legado ideológico y latente en cada ciudadano orgulloso de llevar el ADN argentino.
“El legado ideológico en cuanto a valores democráticos y republicanos, aunque esos valores han sido muchas veces vulnerados, conservamos la libertad como expresión fundamental de la vida y la igualdad ante la Ley, esas manos desnudas que pueden verse en la bandera de la libertad civil hablan de unión pero también de igualdad junto a la soberanía popular representada en el sol naciente”, describe con énfasis.
La concepción del patriotismo encuentra en Jujuy muchos elementos para definirse tal como la conocemos, si bien es cierto que hacia 1813 finalmente cayó la máscara de Fernando VII y una nueva Nación puso en marcha un incipiente proyecto de país, un año antes la gesta del pueblo norteño liderada por el Gral. Manuel Belgrano conocida como Éxodo Jujeño y posteriores batallas merecen un capítulo especial en el temario escolar.
“Veo que los niños pueden interpretar ese gran movimiento de personas siguiendo a Belgrano. La estrategia de tierra arrasada era la única posible ante la diferencia numérica, las diferencias entre una potencia militar y una milicia integrada por muchos inexpertos y heridos… Es importante que nuestras escuelas le de importancia en la historia local, en capacitaciones docentes me mencionan que no lo han repasado”, ejemplifica con cierto pesar.
El abogado y militar de origen porteño, probablemente por su mirada federal, es el representante de la capital nacional que mejores relaciones logró por nuestros pagos. Ballatore recuerda que en los días previos al Congreso de Tucumán, mientras el héroe gaucho Martín Miguel de Güemes llamaba a los hombres que iban a representar a Salta y desde Jujuy se hacía lo propio designando a Teodoro Sánchez de Bustamente la consigna literal “era mueran los porteños”.
No obstante la integración de una Latinoamérica libre, con mayor o menor prosperidad, actualmente llamada crisol de culturas o sociedades multiétnicas, encuentra aún hoy en día su epicentro en el sur continental, así como empezaba a ocurrir 213 años atrás: