Profesionales aseguran que se puede ser sedentario aun yendo al gimnasio. Una reciente investigación sobre personas con diagnóstico de enfermedad cardiovascular confirmó una fuerte asociación entre el comportamiento sedentario y un mayor riesgo de resultados cardiovasculares adversos en el futuro. Este efecto es especialmente notorio en casos de insuficiencia cardíaca y mortalidad cardiovascular.
Se puede ser sedentario, incluso yendo al gimnasio
Así lo señaló un reciente estudio científico internacional. Profesional de la cardiología y deportología explicó esta idea señalando que si una persona pese a ir una hora al gimnasio, si luego se pasa 10 horas frente a un televisor o en cama mirando el celular, cae en el sedentarismo y por ende, en riesgos para la salud.
El estudio también destacó que, aunque realizar actividad física moderada o vigorosa puede mitigar parcialmente este riesgo, es fundamental combatir el sedentarismo prolongado a lo largo del día.
El estudio, publicado en el Journal of the American College of Cardiology (JACC), analizó a 89.530 personas en el Reino Unido con una edad promedio de 62 años. Los participantes usaron sensores de movimiento en la muñeca durante una semana para medir el tiempo sedentario y su actividad física.
Desde la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) señalaron que la recomendación de evitar el sedentarismo se mantiene vigente incluso para quienes realizan ejercicio físico regularmente. El riesgo cardiovascular comienza a aumentar significativamente a partir de un promedio de 10,6 horas diarias de inactividad, sin contar las horas de sueño.
Radio 2 dialogó con Jorge Francella, médico cardiólogo y deportólogo, miembro de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) para profundizar en estos conceptos.
“Hay enfermedades vinculadas, desde hace unos 50 años aproximadamente, a si estamos a la mayoría de nuestro tiempo de manera muy pasiva y sin actividad siendo perjudicial para la salud. Entonces ser tan sedentario, estar tanto tiempo sin hacer nada es un riesgo. Entonces se comenzó a recomendar más actividades, de al menos 30 minutos por día, era una ventaja muy grande porque reducía el 30% de riesgo de enfermedades. Eso empezó a crearse y comunicarse hace unos años en Latinoamérica, proporcionando actividades de 30 minutos incluso diciendo que se podían acumular los minutos en la semana. Necesitamos seguir con ese concepto porque las estadísticas mundiales marcan que entre un 60 y 70% de las personas en el mundo suelen ser sedentarias”, indicó el especialista.
“Esa fue una primera etapa, pasados los años se vio como había gente que no solo hacían esa actividad sino otra más vigorosa durante la jornada. Entonces es importante acumular la mayor parte del tiempo del mejor modo que se pueda, algunos lo harán caminando, otros parados, pero es un primer avance. Lo importante es entender que desde los 10 o 15 años, una persona lo hace de forma continua pero el resto del día pasaban 15 horas sin actividad. Entonces el resto del día sigo siendo sedentario, son buenos los 30 minutos al día pero no por eso hay que quedarse gran cantidad de tiempo sin hacer nada. Entonces lo que se trata en esta segunda etapa es incorporar a los que son más sedentarios a caminar, a hacer algo que permita el cambio de actitud. Como todo en la vida, si queremos cambiar un plan de alimentación se debe empezar y seguir de manera progresiva”, añadió el médico.