Perú arde en llamas por las protestas contra el gobierno de la presidenta Dina Boluarte. Los enfrentamientos entre manifestantes y policías se prolongan en la noche del jueves y hacen de las calles de Lima un violento campo de batalla. Se suma un incendio de grandes proporciones que consume un edificio en el centro de la capital peruana, aunque no se ha podido confirmar si está relacionado con las manifestaciones.
Perú en llamas: un muerto, plazas incendiadas y marchas con brotes de violencia
Varias unidades de bomberos llegaron hasta la Plaza San Martín donde se ha desatado el incendio de un edificio en el Centro Histórico. En otros puntos de la capital se registran enfrentamientos entre manifestantes y la PNP.
Miles de manifestantes se concentraron en varios puntos de la capital, de cara a la marcha autodenominada como "la toma de Lima", que lleva al corazón del país la exigencia de renuncia de la presidenta Dina Boluarte y el adelantamiento de elecciones, después del intento de autogolpe de Estado del ex presidente Pedro Castillo.
Desde temprano, la desértica capital de Perú congregaba a miles de personas llegadas desde zonas remotas de los Andes para protestar contra la presidenta, Dina Boluarte, y apoyar a Pedro Castillo, cuya destitución en diciembre desencadenó manifestaciones letales y sumió al país en el caos político. El paso de las horas y los enfrentamientos en ciudades del sur, hizo crecer la tensión en Lima.
A media tarde, la Policía Nacional del Perú lanzó bombas lacrimógenas para evitar el paso de manifestantes por la avenida Abancay, en el centro de Lima, que lleva al Congreso y al Palacio de Gobierno.
Por la noche, en medio de la máxima tensión, Dina Boluarte afirmó que en las protestas antigubernamentales que sacuden al país "no hay ninguna agenda social" y acusó a los manifestantes de querer "quebrar el Estado de derecho" y generar "caos y desorden" para "tomar el poder de la nación".
"En sus protestas no hay ninguna agenda social que el país necesita (...) Ustedes quieren quebrar el estado de derecho, ustedes quieren generar caos y desorden para, dentro de este caos y desorden, tomar el poder de la nación", declaró la presidenta en un pronunciamiento.
Boluarte agregó que los protestantes "están equivocados" y aseguró que "la situación está controlada" y que su Gobierno actuará "con todo el peso de la ley" para sancionar a los "malos ciudadanos que están generando actos de violencia".
La gran marcha convocada por organizaciones sociales, sindicales y regionales produce tensión en distintos puntos de la capital peruana. Primero los manifestantes se juntaron en las inmediaciones a la Corte Superior de Justicia, el Paseo de los Héroes Navales, las avenidas Manco Cápac y Alfonso Ugarte.
El gobierno desplegó más de 11.000 agentes de la Policía Nacional de Perú (PNP) para intentar controlar las manifestaciones. Víctor Zanabria, jefe de la Región Policial Lima remarcó que un contingente de 1.800 policías "estará de servicio para que no se produzca ningún desmán y aseguremos las actividades en la ciudad de Lima".