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Un preso de Gorriti realizaba operaciones bancarias con un celular, desde su celda

El hecho se registró en el Servicio Penitenciario Nº 1, cuando el personal se encontraba realizando rondas rutinarias. Además, se secuestraron cuatro armas blancas que el recluso tenía en su sector.

  • Encontraron a un preso realizando operaciones bancarias con un celular en su celda.
  • El interno de la cárcel de Gorriti, además tenía otro aparato en su poder.
  • Se encontraron cuatro armas blancas en el lugar del recluso que fue aislado.

Un interno del Servicio Penitenciario Nº 1 del barrio Gorriti de San Salvador de Jujuy, fue descubierto con dos teléfonos celulares en su celda realizando operaciones bancarias desde uno de ellos, a nombre de otro preso y al menos cuatro armas blancas en su poder.

El hecho tuvo lugar hace algunos días y las actuaciones quedaron a cargo del personal de la Seccional Nº 2, donde los agentes penitenciarios realizaron la denuncia y presentaron los elementos secuestrados para que la Fiscalía realice las pericias correspondientes, buscando establecer si estuvieron involucrados en algún ilícito.

Igualmente, dejaron constancia de las amenazas proferidas por el preso, quien fue aislado del resto de la población carcelaria para evitar que agitara al resto de los internos.

De acuerdo a lo que se pudo establecer, el personal del establecimiento carcelario ubicado en la capital, se encontraba realizando las rondas pertinentes por el lugar, cuando en una de las celdas divisaron que uno de los presos tenía en su poder dos aparatos telefónicos, los cuales intentó ocultar rápidamente ante la llegada de los penitenciarios.

Al momento de secuestrar uno de los aparatos, el mismo se encontraba encendido con un mensaje de SMS con un CBU a nombre de otro preso, quien se encuentra cumpliendo condenado por el homicidio de un hombre en Alto Comedero. El otro celular, se encontraba apagado, pero igualmente ambos quedaron bajo custodia de los encargados.

Ante esta situación, el recluso comenzó a alterarse y proferir todo tipo de insultos y amenazas sobre los actuantes, hasta que finalmente fue separado del lugar para no alterar el orden del resto de los presos allí alojados.

Tras revisar el área del protagonista, se encontraron también una planchuela de hierro de 15 centímetros de largo, una planchuela de hierro con punta afilada de 45 centímetros, una varilla de hierro con punta afilada de 27 centímetros y una varilla de hierro torcinado con señas de ser afilada.

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