Crece el malestar en el sector de la salud pública provincial, el cual viene realizando reclamos hace más de un mes.
Este jueves se concretó una nueva manifestación, en particular de los trabajadores del Hospital Pablo Soria quienes volvieron a exponer su indignación con la situación laboral y exigieron mejoras salariales que alcancen a todas las áreas.
En este contexto, agentes sanitarios y enfermeros autoconvocados remarcaron que la discrecionalidad que maneja el gobierno solo genera división entre el personal sanitario.
Además, denunciaron que a los contratados los amenazan con dar de baja, descuentos o quita de sueldos si participan en las protestas.
“Somos agentes sanitarios convocados por el tema del sueldo que es muy precario y queremos hacerle sentir al gobierno que hay un malestar generalizado en la provincia. Dieron un aumento que solo genera división entre nosotros, se reconoce solo a los médicos cuando todos trabajamos en la emergencia y se reconoce solo a una parte, lo que nos parece muy injusto”, remarcó un empleado sanitario.
Otro agente en presente en el lugar sentenció: “Somos aproximadamente mil contratados, entre agentes sanitarios y enfermeros y algunos compañeros están sufriendo por aprietes si venimos a marchar. Amenazan con quita de sueldo o descuentos, cuando están en su derecho a protestar”.
